A medida que los países van saliendo de los peores meses de la crisis sistémica generada por el coronavirus, los gobiernos tienen la oportunidad única para llevar adelante una recuperación ecológica e inclusiva que tenga en cuenta la protección de las personas, pero también del planeta. Un documento publicado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD) advierte que debemos aplicar las lecciones aprendidas de otras crisis para acelerar una recuperación justa y baja en carbono. Esto significa integrar sistemáticamente las consideraciones medioambientales y de equidad en el proceso de recuperación y estímulo económico. El comunicado afirma que, si nos centramos en cinco sectores estratégicos, podemos reducir hasta el 90% de las emisiones de carbono actuales.