En la inmensidad de términos que forman la lengua española, en muchas ocasiones tendemos a equiparar significados de palabras que suenan similares. Tal vez, las dos palabras más importantes en las que ocurre este suceso sean “prometer” y “comprometer”. La primera expresa la intención de cumplir un compromiso futuro, mientras que la segunda, expresa la obligación o vinculación a algo o alguien de manera firme.