En el Día Mundial contra el Hambre, que se celebró ayer, 16 de octubre, los nuevos datos de Naciones Unidas y de Acción contra el Hambre alertan de una realidad tan injusta como evitable: mientras el mundo produce comida suficiente para todos, 673 millones de personas se acuestan cada noche con hambre. La crisis no afecta a todos por igual,se concentra en unos pocos países, pero refleja un sistema alimentario profundamente desigual, marcado por los conflictos, el cambio climático y la pobreza.