En el renting industrial, cada vehículo que se pone en circulación —ya sea un camión frigorífico, un volquete, una góndola hidráulica o una furgoneta con transformación— es mucho más que una herramienta de trabajo. Representa un compromiso de eficiencia, seguridad y sostenibilidad compartido entre la empresa de renting y el usuario que lo conduce.