No dejemos que el lenguaje común de los ODS se diluya en medio de normativas técnicas, temores reputacionales o disputas ideológicas. Porque sin relato, no hay transformación visible. Y sin visibilidad, no hay rendición de cuentas posible.
Al amanecer, la llanura extremeña de Talayuela se enciende con destellos metálicos. En apenas una década, los trigales se han convertido en uno de los mayores continentes solares de Europa. Esta transformación simboliza el fenómeno más significativo de la España contemporánea: la conversión de los territorios despoblados del interior en la gran potencia energética renovable del país.