Este 2024 augura un horizonte prometedor y lleno de oportunidades para Cataluña y, especialmente, Barcelona. Y es que la capital catalana ha tenido el privilegio de convertirse en la anfitriona de diversas citas de gran importancia internacional. Posiblemente la más destacada de ellas sea la celebración a inicios de verano de la 37ª edición de la Copa América, un encuentro declarado de excepcional interés público, y que sin duda va a dejar un gran impacto económico en la ciudad, a la par que deportivo, social y cultural.