Publicado el
El transporte de mercancías ante el reto de la sostenibilidad

El transporte de mercancías por carretera es vital para que el mundo se mantenga en movimiento. Lo comprobamos durante la crisis del coronavirus, los camiones son una pieza fundamental del engranaje económico. Sin ellos, los lineales de los supermercados se vacían, los hospitales se quedan sin medicamentos y las fábricas se paran. Si lo trasladamos a datos, en 2021 el 95% del transporte interior de mercancías en España se realizó por carretera.

Sin embargo, no es un secreto que el transporte por carretera también tiene un impacto sobre los seres humanos y el planeta que habitamos. Las duras condiciones de trabajo de los conductores y la contribución al aumento de las emisiones de carbono son dos de los aspectos más complejos a los que se enfrenta el sector. Ahora, más que nunca, sabemos que abordar éstas y otras cuestiones, es clave para conseguir que el negocio sea sostenible en el largo plazo.

Al hablar de sostenibilidad, se puede cometer el error de pensar que se trata solo de retos medioambientales. La sostenibilidad es, de hecho, la intersección entre las necesidades de la sociedad, la economía y el medioambiente. Todas las empresas deben perseguir ese equilibrio, y las de transportes también. Para ello es preciso pensar en cómo podemos generar valor para todos nuestros grupos de interés: conductores, talleres, cargadores, proveedores, accionistas, etc. En la medida en que seamos capaces de crear valor para todos ellos a largo plazo, seremos una empresa sostenible.

“Trabajo decente y crecimiento económico” es el octavo de los objetivos de desarrollo sostenible propuestos por la ONU. Llevar este objetivo a la práctica en el sector del transporte por carretera es todo un reto y al mismo tiempo una necesidad imperativa. Nos encontramos en una situación de escasez de personal cualificado, mientras que la edad media de los conductores en Europa se sitúa en 47 años. Sin duda, la sostenibilidad del capital humano en el sector es frágil y se tienen que tomar medidas cuanto antes, o de lo contrario podríamos llegar a sufrir un shock de mano de obra.

En Lodisna estamos convencidos de que las personas son el motor de las empresas y que invertir en ellas, es invertir en nuestro futuro. Para ello hemos puesto en marcha un programa que hemos bautizado con el nombre de “DriverCare” y que tiene ocho áreas de actuación: acceso y visibilidad de la profesión, acogida e integración en la empresa, capacitación y desarrollo personal, salud y seguridad, comunicación y transparencia, conectividad y digitalización, conciliación familiar y compensación. De esta manera, queremos fortalecer la profesión de conductor desde todos los ángulos.

Por otro lado, el sector del transporte por carretera tiene un papel crítico en la transición energética, ya que es un consumidor intensivo de combustibles fósiles. Nuestra actuación debe ir más allá de la del resto de empresas, y no vale tan solo con medir nuestra huella de carbono y poder dar razón de su impacto. En Lodisna nos tomamos este liderazgo como el deber de estar dispuestos a invertir, arriesgar y participar de forma activa en la validación de nuevas tecnologías limpias. Recientemente hemos incorporado un camión eléctrico a la flota y hemos puesto en marcha un proyecto para el testeo de biocombustibles fabricados con aceites de cocina usados. Estas iniciativas forman parte, entre otras, de nuestro compromiso con la reducción del impacto de nuestra actividad en el medioambiente.

Como líderes, nuestra responsabilidad es impulsar una transición energética justa para todos, y eso trae desafíos. La sostenibilidad es cara: el precio de los camiones eléctricos y los biocombustibles es muy superior. Los principales fabricantes de vehículos pesados apuestan por la pila de hidrógeno como tecnología limpia a largo plazo, y ven la electrificación como un paso intermedio. Existe una notable incertidumbre sobre cuál será la tecnología que acabe imponiéndose. Todo ello nos lleva a pensar que los biocombustibles de residuos representan una vía de transición asequible y menos arriesgada para las pequeñas y medianas empresas, ya que ponen a su alcance las emisiones netas sin necesidad de invertir en renovación de flota. Cabría esperar que se estableciesen incentivos fiscales para potenciar su uso y mitigar el traslado del incremento de los costes a los consumidores al mismo tiempo que se impulsa la descarbonización del sector.

Para terminar, la sostenibilidad no es algo que podamos hacer solos, por eso trabajamos con un ecosistema compuesto por grandes empresas establecidas, startups, universidades e investigadores. También colaboramos con las instituciones para adaptar normativas y ordenanzas a los nuevos modelos de movilidad. Tenemos claro que la vía para conseguir el éxito pasa por estar alineados.  

* Este artículo forma parte de la Alianza entre la plataforma Empresas por la Movilidad Sostenible y Diario Responsable. Artículos relacionados:

- May López. Cuidando lo esencial

- Ramón Valdivia. Sostenibilidad humana

- Jan Choueiri. Por qué la movilidad debe dejar de ser insostenible

- Maite Manzano. La movilidad sostenible, una demanda social

-Vicente Pascual. Los talleres también apuestan por la sostenibilidad

-Cristina Lloréns Santonja. Movilidad, pero cibersegura

-José Enrique González. Bridgestone y su compromiso con la movilidad eléctrica

-Francisco Casas. La movilidad sostenible, la llave para mejorar nuestro futuro

- Rosa Pernau Codina. Movilidad sostenible en la industria

- Cristina Rosado. Una Asistencia en Carretera verde para una Movilidad responsable

- David Moreno Montejo. Hacia una movilidad universal y sostenible

- Heike de la Horra. Cómo reducir la huella medioambiental de las empresas de transporte

- May López. Las Zonas de Bajas Emisiones y los retos a los que nos enfrentamos

- Bea González. Porque la movilidad inteligente va de personas y no solo de coches

- José Luis Vidal Montero. La movilidad que nos viene: sostenible y multienergética

¡Comparte este contenido en redes!

300x300 diario responsable
 
CURSO: Experto en Responsabilidad Social Corporativa y Gestión Sostenible
 
Advertisement
Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies