Ventajas de hacer desplazamientos más responsables y sostenibles tanto dentro como fuera de la empresa

Podemos definir la movilidad sostenible como aquella capaz de satisfacer las necesidades de la sociedad de moverse libremente sin tener que sacrificar otros valores, especialmente los ambientales. Y es que se puede decir que todos los ciudadanos tenemos derecho a disfrutar de un sistema de movilidad sostenible, el cual debe desarrollarse no sólo fuera del trabajo sino también dentro de él. Por ello, muchas son las empresas e instituciones que trabajan diariamente para fomentar e impulsar esta movilidad más eficiente y respetuosa con el planeta.

Murillo de Paula

Los pequeños gestos diarios son los que marcan la diferencia. Por ello, desde Norauto abogamos por una movilidad segura, sana y sostenible. Y es que utilizar el transporte público, la bicicleta, el patinete eléctrico, realizar los desplazamientos a pie, hacer un uso racional del vehículo o abogar por coches más eficientes, son alternativas para contribuir a una movilidad sostenible que es beneficiosa para todos. Fomentamos el uso de estas formas de desplazamiento no sólo para ir y volver del trabajo, sino también para aquellos trayectos que tienen lugar durante la jornada laboral.

Desde Norauto somos firmes defensores de una movilidad más sostenible y por ello enumeramos algunas ventajas para decantarse por estos medios de transporte menos contaminantes:

1.Tienen un menor coste de compra y, por lo tanto, suponen un mayor ahorro. Efectivamente, comprar una bicicleta o patinete eléctrico no supone el mismo esfuerzo económico que adquirir un coche. En el caso de los coches eléctricos, el desembolso inicial puede ser más elevado. Sin embargo, a la larga puede suponer un ahorro tanto en averías, como en mantenimiento y, por supuesto, en combustible.

Desde Norauto abogamos por un uso eficiente, responsable y racional del coche. En este sentido, un coche híbrido o eléctrico puede ser el medio perfecto para un desplazamiento de largo recorrido, mientras que la bicicleta o el patinete son medios idóneos para los trayectos cortos.

Usar una bicicleta eléctrica supone un ahorro anual de 2.010 euros respecto a los turismos. En lo que se refiere al patinete eléctrico, el ahorro anual es de 1.920 euros respecto a un coche.

2. Se reduce la contaminación, tanto ambiental como acústica. Por lo general, el transporte es más eficiente ahora, ya que los nuevos vehículos emiten menos dióxido de carbono por kilómetro que en el Sin embargo, el volumen de transporte ha crecido, es decir, nos movemos más que antes y hacemos más kilómetros. Actualmente, el transporte representa aproximadamente una cuarta parte de las emisiones totales de gases de efecto invernadero de la UE, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. De estas emisiones, casi tres cuartas partes proceden del transporte por carretera y más de la mitad, de los automóviles.

En este sentido, hay que tener en cuenta que ir en bicicleta eléctrica supone un 99% de reducción de emisiones en un año respecto a un coche; y un 97% si se trata de un patinete eléctrico. Además, se disminuye el ruido ambiental que se genera. De esta forma, se contribuye al objetivo global de reducción de las emisiones de CO2.

Se evitan atascos. Los conductores españoles pierden, en algunas ciudades, más de 100 horas al año en congestiones de tráfico. Los medios de transporte más sostenibles permiten evitar la congestión propia que se origina en las horas punta de acceso y salida del Se ahorra tiempo y estrés. Además, se contribuye a la pacificación de las ciudades, es decir, menos atascos y ruidos en los núcleos urbanos.
Si se va a pie o en bicicleta se hace ejercicio y, por lo tanto, favorece a la salud. Ir andando o en bicicleta supone hacer ejercicio y, con ello, mejora el estado de salud de las personas. De hecho, está demostrado que moverse en bicicleta mejora el sistema inmunológico, se fortalecen los músculos y mejora el estado de ánimo. Por supuesto, es innegable que un planeta más limpio afecta directamente al bienestar y salud de las
Menos mantenimiento. Las bicicletas y patinetes eléctricos conllevan un menor mantenimiento, lo que implica un ahorro de tiempo y dinero. Igualmente, los coches eléctricos también tienen menos averías y se reduce el Con todo ello, los vehículos pasan menos tiempo en taller y, por lo tanto, se puede ser más eficiente y productivo.
Sin problemas para estacionar. Bicicletas, patinetes, scooters y coches eléctricos tienen más facilidades a la hora de aparcar, ya que, por ejemplo, no les afecta el servicio de estacionamiento regulado existente en el centro de muchas ciudades.
Sin restricciones para moverse por las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Muchos municipios cuentan con zonas bien delimitadas para restringir la entrada al núcleo urbano de aquellos coches que más contaminan.
Hacer un uso racional de los desplazamientos en las empresas y en el ámbito personal hace que haya menos movilidad y, por lo tanto, se reduzcan las posibilidades de sufrir un accidente de tráfico.
Una empresa responsable genera buen ambiente de trabajo. Y es que no hay nada como ver que la compañía donde se trabaja está comprometida con algo tan importante como el planeta.
Contribuye a la imagen y responsabilidad social corporativa. Porque todas las empresas deben devolver, e intentar mitigar, su impacto medioambiental.

Estas son algunas de las ventajas. Sin embargo, la más importante de todas es, sin duda, el impacto sobre el medioambiente de cambiar la forma en la que nos movemos. Y es que a veces olvidamos que planeta sólo hay uno y, por ello, debemos hacer todo lo que está en nuestras manos para cuidarlo.

* Este artículo forma parte de la Alianza entre la plataforma Empresas por la Movilidad Sostenible y Diario Responsable. Artículos relacionados:

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