Con el fin del verano, cada 16 de septiembre, llega el “Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono”, un recordatorio que nos advierte la importancia de proteger este escudo natural que permite la vida en la tierra.
Ha sido uno de los temas estrella de platós de TV y de radio y, por qué no decirlo, de los populares chiringuitos durante estos últimos meses: los efectos del sobreturismo no pasan inadvertidos para nadie y se hacen notar en las localidades que acogen a los ociosos visitantes.