Publicado el
Con un respaldo mayoritario, el Parlamento Europeo exige una hoja de ruta ambiciosa para proteger el agua, uno de los recursos más amenazados del continente. Solo el 39,5 % de las aguas superficiales europeas gozan de buena salud ecológica y el 30 % de la población vive bajo estrés hídrico. La nueva estrategia, prevista para este verano, busca revertir esta tendencia crítica.
Europa se seca: el Parlamento exige una respuesta urgente para proteger el agua

Europa afronta una crisis hídrica silenciosa pero persistente. Según datos oficiales recogidos por El Parlamento Europeo, cada año un 20 % del territorio de la Unión y hasta el 30 % de su población se ve afectado por estrés hídrico, una situación en la que la demanda de agua supera la disponibilidad. La degradación del hábitat, la sobreexplotación de los recursos acuáticos y el impacto del cambio climático están poniendo en jaque a ríos, lagos, acuíferos y aguas costeras.

En este contexto, el Parlamento Europeo aprobó recientemente una resolución con 470 votos a favor, 81 en contra y 92 abstenciones, en la que reclama a la Comisión Europea una estrategia integral y ambiciosa para gestionar de forma más eficiente los recursos hídricos. La iniciativa busca reforzar la preparación ante sequías e inundaciones, reducir la contaminación del agua y mejorar la resiliencia hídrica de la región.

Objetivos concretos: eficiencia, salud y adaptación climática

La propuesta parlamentaria no se queda en declaraciones: reclama establecer objetivos sectoriales de eficiencia hídrica y captación, basados en evaluaciones de riesgo específicas. También se plantea una ofensiva contra la contaminación del agua provocada por fármacos, pesticidas, microplásticos, bacterias resistentes a antibióticos y los conocidos “productos químicos eternos” (PFAS), cuya persistencia amenaza la salud de ecosistemas y personas.

Además, se aboga por que la adaptación al cambio climático se integre transversalmente en todas las políticas que afectan al uso del agua y del suelo. Esto es clave para zonas con desafíos particulares como la cuenca mediterránea, las islas y las regiones ultraperiféricas.

Uno de los pilares de la futura estrategia será la inversión. El Parlamento insta a la Comisión a activar fondos específicos para resiliencia hídrica, incluyendo la modernización de infraestructuras, el impulso de soluciones basadas en la naturaleza y la apuesta por tecnologías emergentes que optimicen el uso del agua. Entre las innovaciones propuestas se encuentran sistemas de riego inteligente, inteligencia artificial para detectar fugas en tiempo real y plataformas digitales para la recopilación de datos, alertas tempranas y protección frente a ciberataques en infraestructuras críticas.

Según informa el Parlamento Europeo, la Estrategia Europea de Resiliencia Hídrica se presentará antes del verano de 2025. Esta hoja de ruta marcará un punto de inflexión en la manera en que Europa gestiona uno de sus bienes más preciados. A falta de tiempo y con el clima jugando en contra, la ambición política parece, por fin, alinearse con la urgencia ambiental.

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies