La sostenibilidad de Europa en el año 2050 está en el centro de un nuevo informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA, por sus siglas en inglés), que propone cuatro escenarios distintos para transformar los sistemas fundamentales de producción y consumo del continente. Con la crisis climática y los riesgos globales como telón de fondo, el informe "Imagining a sustainable Europe in 2050: exploring implications for core production and consumption systems" plantea cómo pueden evolucionar sectores clave como la alimentación, la energía, la movilidad y el entorno construido, esenciales para satisfacer las necesidades básicas de los europeos, pero también responsables de importantes impactos ambientales.
Según el informe de la EEA, estos sistemas no solo son cruciales para el bienestar humano, sino que también representan una de las principales fuentes de presión sobre el medio ambiente y el clima. La transición hacia un modelo sostenible de largo plazo es, por tanto, una necesidad urgente.
Cuatro escenarios para un futuro sostenible
El informe presenta cuatro "imaginarios" sobre cómo podrían desarrollarse los sistemas europeos, dependiendo de diferentes factores sociales, modelos de gobernanza y avances tecnológicos. Estos futuros hipotéticos exploran diferentes caminos hacia la sostenibilidad:
A pesar de las diferencias entre estos futuros, todos coinciden en soluciones clave para la sostenibilidad, como la adopción de proteínas alternativas, el uso de soluciones basadas en la naturaleza, la electrificación del transporte y la expansión de las energías renovables.
Probando la resiliencia ante posibles disrupciones
El informe también ha realizado una prueba de resistencia de cada uno de los escenarios ante posibles disrupciones globales, como el colapso de sistemas digitales, crisis climáticas extremas o una nueva crisis financiera. El ejercicio ha revelado capacidades clave necesarias para navegar estos cambios y construir resiliencia, como la gobernanza colaborativa, el compromiso social, la planificación espacial y la anticipación de choques futuros.
Pensando a largo plazo para construir resiliencia
Este informe llega en un momento crucial, cuando la Unión Europea está reconsiderando su papel global y buscando asegurar una prosperidad sostenible en el futuro. El mensaje es claro: para desarrollar respuestas políticas efectivas ante los retos venideros, es esencial un enfoque a largo plazo que tenga en cuenta las múltiples posibilidades, desafíos y oportunidades que se nos presentan.
El informe está dirigido tanto a responsables políticos como a expertos en los sectores clave de producción y consumo, e invita a todos los actores sociales a imaginar futuros resilientes y a empezar a construirlos hoy mismo.