Los efectos de la pandemia, sumado a las múltiples crisis actuales impactan de manera directa en las cifras del hambre y la desigualdad. António Guterres recuerda que en todo el planeta hay casi un millón de personas que viven en condiciones de hambruna y que 3000 millones de individuos no pueden costearse una alimentación saludable. El titular de la ONU insta a los Gobiernos, científicos, el sector privado, la sociedad civil y las instituciones financieras a actuar para revertir estas tendencias.