Ante este complejo panorama, resulta crítico mitigar el impacto socioeconómico del coronavirus. Durante el seminario web `Banca responsable en la crisis del COVID-19´, organizado por UNEP FI (Iniciativa Financiera del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), representantes de entidades financieras de todo el mundo han compartido sus estrategias para hacer frente al coronavirus y sus efectos en la sociedad.
Respuestas coordinadas en línea con las medidas decretadas por los gobiernos; cercanía con los clientes y con la población más afectada; y una comunicación transparente, rápida y eficaz con todos los grupos de interés han sido los puntos comunes que han marcado la acción de las entidades financieras frente al impacto del coronavirus.
Entidades de países muy castigados, como UniCredit en Italia o BBVA, único banco español presente en este encuentro virtual, han destacado la coordinación, la responsabilidad y la anticipación como claves para hacer frente a esta crisis.
Primero, los empleados.
“Lo primero que hicimos fue velar por la salud de nuestros empleados, por lo que generalizamos el trabajo en remoto desde el inicio de la crisis”, ha explicado Lidia del Pozo a sus colegas en otras entidades. “Reducir la movilidad es la mejor forma de evitar contagios, tanto dentro como fuera del banco. En el caso de España, buena parte de la plantilla de BBVA en servicios centrales ya teletrabajaba desde 2014 por lo que este paso fue natural y así lo está siendo ahora. A nivel global, el 90% de los empleados de servicios centrales y el 50% de la red de oficinas trabaja hoy desde sus casas”, ha subrayado.
La entidad también lanzó un portal alojado en la intranet con información actualizada que incluía protocolos de salud, consejos para empleados, así como un cuestionario diario para monitorizar el estado de todos los profesionales del grupo en todo el mundo.
Garantizar las operaciones.
A continuación, Lidia del Pozo explicó que el banco se aseguró de “garantizar el mantenimiento de las operaciones” y el apoyo a los clientes. “Dadas las completas características de nuestra aplicación móvil -la de España ha sido reconocida por Forrester como la mejor del mundo en los últimos tres años- seguíamos ofreciendo nuestros servicios con normalidad”, ha explicado.
La importante apuesta del banco por la digitalización está permitiendo que los clientes puedan realizar la mayor parte de sus transacciones desde sus casas a través de dicha aplicación, la web y la Línea BBVA, así como a través de los gestores remotos.
“Pero además teníamos que seguir ofreciendo servicio a través de las oficinas, tal y como recoge el Real Decreto del Gobierno del estado de alarma. Por ello, se mantuvieron y se mantienen abiertas las oficinas necesarias para dar ese servicio, preservando en todo momento la seguridad de los empleados y los clientes”, añade.
En segundo lugar, entre las acciones para los clientes que ha detallado Lidia del Pozo, en el caso de España se encuentran las medidas de apoyo a clientes particulares en el pago de sus préstamos; el aplazamiento del pago del alquiler para las familias que habiten en casas del Fondo Social de Viviendas (FSV), la puesta a disposición de pymes y autónomos hasta 25.000 millones de euros para mitigar el impacto del coronavirus; o la suscripción de la Línea ICO de 400 millones de euros para empresas frente a la pandemia.
Además, BBVA está ayudando a los usuarios no digitales en España a operar con el banco desde casa y ha facilitado que los clientes pensionistas puedan retirar efectivo de forma gratuita en cualquier cajero de España.
Responder a las necesidades de la sociedad.
“En tercer lugar articulamos un plan para responder a las necesidades de la sociedad en esta situación”, ha afirmado la directora de programas de inversión en la comunidad de BBVA. “Comenzamos a adquirir y donar equipamiento médico necesario para los hospitales (respiradores, tests, mascarillas,…). La adquisición efectiva de este tipo de material que había que comprar fuera de España, fundamentalmente en China, resultaba clave, especialmente por la logística y por el acceso a proveedores”, explica. “En ese sentido, las autoridades sanitarias no sólo necesitan dinero, sino capacidades y recursos en aquellos mercados. Por eso, han resultado fundamentales las alianzas con empresas como Inditex que ha puesto a nuestra disposición su capacidad para transportar vía aérea todo el material adquirido allí. El transporte se ha convertido en absolutamente estratégico”, concluye.
A su juicio, la labor de apoyo con ONGs y voluntarios (en la que trabaja ahora el Grupo BBVA) es muy importante a nivel local, especialmente para aquellos más desfavorecidos. “Al igual que el apoyo a la investigación científica para encontrar un tratamiento frente al coronavirus”, ha añadido, unos programas que la entidad también impulsa.
Además, y según ha explicado Del Pozo, BBVA ha puesto en marcha una campaña entre sus empleados para unirse a la ayuda solidaria contra la pandemia provocada por el COVID-19. Por ejemplo, los trabajadores de BBVA en varios países del grupo pueden colaborar con esta causa a través de la campaña ‘Tu aportación vale el doble’, en la que por cada euro aportado por empleado, la entidad contribuirá con otro euro más.
Por último, Lidia del Pozo se ha referido a la comunicación responsable y proactiva con todos los grupos de interés, liderada por el propio presidente y consejero delegado. Además, ha añadido que “simbólicamente, la sede corporativa de BBVA en Madrid, La Vela, se ilumina con un corazón rojo y una cruz azul sumándose al homenaje colectivo que la sociedad española tributa desde sus ventanas y balcones cada día a las 8 de la tarde”.
Más de 100 asistentes pertenecientes a entidades financieras que son miembros de UNEP FI, desde China a Sudáfrica pasando por Canadá, tuvieron ocasión de conocer durante este encuentro virtual acerca de las prácticas de aquellas entidades -como es el caso de BBVA- que han tenido que hacer frente a la gestión de esta crisis en países especialmente golpeados.