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Brechas de Género:conciliación

Las diferencias en la conciliación y la corresponsabilidad son la clave de bóveda de la brecha de género porque influyen en el resto de desigualdades. Las mujeres son las que más se acogen a reducciones de jornada y excedencias para cuidar a la familia o, incluso, dejan de trabajar. La maternidad influye en la presencia y la permanencia de las mujeres en el mercado laboral, el número de las que dejan de trabajar para tener hijos es muy superior al de los hombres. También son las que más horas dedican a cuidados del hogar y la familia de forma diaria. 

Todo ello se traduce en menos tiempo disponible que los hombres para dedicarlo a la carrera profesional (formación, networking, actividades estratégicas, adquisición de mayor experiencia). Y no solo hablamos de tiempo físico, sino también de tiempo mental, pues debe tenerse en cuenta todo el que se consume en estar pendiente de dos facetas de la vida diferentes que demandan atención distinta pero muchas veces simultánea, con la consiguiente carga extra de estrés, que puede afectar a la salud y derivar en mayor número de bajas por estos motivo.

Menor tiempo es menor salario, menores opciones de promoción, menos presencia en puestos de poder. Sin embargo, la solución no es una cuestión de medidas, sino de cambio de valores del sistema. Mientras el cuidado sea un valor secundario por detrás de la productividad laboral y se conceptúe como una carga y no como un valor, seguirá manteniéndose un sistema laboral que impide a las personas vivir equilibradamente y las brechas seguirán existiendo.

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Opinión8M2024

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