La solidaridad está en el ADN de BBVA. No es la primera vez que la banca se pone a disposición de quienes más lo necesitan. En el pasado, la entidad financiera ha puesto en marcha programas de ayudas para emergencias en terremotos en países como Turquía, México o Chile, y también tras la invasión rusa a Ucrania.
Esta vez, Marruecos y Libia se encuentran en situaciones críticas que requieren de la cooperación y la solidaridad de todos los sectores. En Marruecos, cinco días después del seísmo, las víctimas mortales superan las 2.900 personas y decenas de poblaciones devastadas permanecen incomunicadas, según el Ministerio de Interior marroquí.
Por su parte, en Libia, las autoridades del país han informado de 5.200 fallecidos tras el colapso de dos represas en la región del Derna. Según la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU, se han visto desplazadas al menos 30.000 personas. Adicionalmente, BBVA está estudiando otras medidas de apoyo para movilizar ayuda solidaria para los damnificados.