Se trata de una importante subvención que materializa el compromiso de BlackRock por mejorar la disponibilidad y asequibilidad de soluciones energéticas no contaminantes para ayudar al mundo a hacer la transición hacia una economía con cero emisiones netas. Las energías no contaminantes constituyen una prioridad para BlackRock y sus clientes. La subvención de 100 millones de dólares responde a la convicción de BlackRock de que el riesgo climático constituye un riesgo de inversión y complementa otras iniciativas centradas en la confluencia entre la sostenibilidad y la tecnología.
Catalyst representa un nuevo modelo que ilustra cómo las empresas, los gobiernos y la filantropía privada pueden financiar, producir y garantizar la adopción generalizada de tecnologías limpias de última generación. La prioridad inicial de Catalyst será ayudar a acelerar el desarrollo y la comercialización de cuatro tecnologías energéticas no contaminantes: la captura directa de CO2 del aire, el hidrógeno verde, el almacenamiento energético de larga duración y el combustible de aviación sostenible. El programa de Breakthrough Energy invertirá en estas tecnologías, que son esenciales para alcanzar las cero emisiones netas, con el objetivo de reducir sus costes y que así puedan competir y reemplazar las opciones existentes que emiten gases de efecto invernadero, abaratando lo que se conoce como “primas verdes” y, en última instancia, acelerando su adopción generalizada.
Esta alianza clave de BlackRock con Catalyst representa el primer compromiso filantrópico de la compañía con la lucha contra el cambio climático y la mayor subvención de la Fundación BlackRock desde su creación en febrero de 2020. Guiada por su objetivo de crear una prosperidad sostenible para las personas, las sociedades y el planeta, la Fundación BlackRock realiza inversiones filantrópicas y entabla alianzas para conseguir economías y sociedades más inclusivas y sostenibles. Aprovecha la amplia experiencia y los recursos de BlackRock para ayudar a que más personas fuera del alcance de su actividad principal disfruten de seguridad financiera y se incorporen a la senda hacia la prosperidad sostenible.
Larry Fink, consejero delegado de BlackRock, declaró que “Promover la transición hacia un mundo con cero emisiones netas y conseguir un futuro más sostenible es una responsabilidad compartida de los ciudadanos, las empresas y los gobiernos. Movilizar los 50 billones de dólares necesarios para financiar la transición energética del planeta requerirá nuevas e innovadoras colaboraciones entre la esfera pública, el sector privado y las entidades sin ánimo de lucro”
Por su parte,Bill Gates, fundador de Breakthrough Energy, afirmó que: “Para evitar un desastre climático se necesitará una nueva revolución industrial. Necesitamos hacer que las tecnologías y los productos que no generan emisiones sean tan baratos como los que sí las generan. Las tecnologías en las que pone el foco Catalyst son esenciales para que el mundo pueda alcanzar las cero misiones netas, pero requieren inversiones considerables que las abaraten lo suficiente como para que el mundo entero pueda permitírselas. Mediante la coordinación de las inversiones y su canalización hacia estas tecnologías vitales, podemos reducir sus primas verdes, acelerar su comercialización y tener un impacto positivo significativo en nuestro planeta.”
En su calidad de aliado clave, BlackRock se asociará también con Catalyst para apoyar inversiones en proyectos de demostración comercial en una fase temprana, brindar perspectivas sobre la implicación continuada del sector privado, ofrecer análisis sobre estrategias de inversión y despegue y animar a más empresas a unirse a Catalyst. A través de Catalyst y sus demás programas, Breakthrough Energy está trabajando para abordar los déficits de financiación que impiden que tecnologías clave contra el cambio climático alcancen la escala necesaria. Además de Catalyst, Breakthrough Energy también supervisa una red de vehículos de inversión, programas filantrópicos, iniciativas de promoción de políticas y otras actividades, todo ello con el fin a ayudar al mundo a conseguir las cero emisiones netas en 2050.
“Nuestra colaboración con el programa Catalyst constituye un compromiso filantrópico de cinco años de duración para invertir en tecnologías avanzadas que ayudarán a desarrollar soluciones escalables para la generación de energías limpias que contribuyan a conseguir los objetivos de descarbonización del mundo y mitiguen el desigual impacto del cambio climático en nuestras sociedades” concluyó Fink.