Pascual es una empresa familiar con un conjunto de valores consolidado y diferenciador, referente en el sector de la alimentación. Para la compañía líder en España el cuidado de las personas y del medioambiente es fundamental. Es por esto, que en colaboración con el Grupo Saica, referente europeo en la producción de papel reciclado para cartón ondulado, producción de embalajes y el desarrollo de soluciones circulares para el aprovechamiento de residuos, ha conseguido desarrollar con éxito tres modelos de circularidad de residuos. En primer lugar, reintroducción de los desechos de papel y cartón en nuevas formas de packaging sostenible; en segundo lugar, recuperación del polietileno de baja densidad para darle una segunda vida en forma de film de agrupación y, por último, la valoración energética de los residuos para producir electricidad y vapor.
Estas buenas prácticas, basadas en el desarrollo de estos tres modelos de circularidad de residuos, forman parte de los objetivos medioambientales de Pascual, que buscan minimizar el impacto de sus actividades, favoreciendo la economía circular. El Grupo Saica tiene como objetivo, igualmente, seguir avanzando en el camino hacia una economía cada vez más circular. Estas iniciativas se enmarcan dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas y, en concreto, en los ODS 12 (producción y consumo responsable), 13 (acción por el clima) y 17 (alianzas para lograr los objetivos).
Pascual recupera el papel y el cartón gracias al primer modelo de circularidad. Concretamente, el Grupo Saica consiguió recuperar 574 toneladas de papel y cartón de Pascual en 2020. Estas toneladas se reciclan y transforman en bobinas de papel reciclado de alta calidad. Posteriormente, se ha utilizado para fabricar alrededor de 5,2 millones de cajas nuevas, que vuelven a los lineales en forma de nuevos embalajes con productos Pascual.
En el segundo modelo, se busca darle una segunda vida al plástico. Aquí, Saica ha recuperado 59 toneladas de polietileno de baja densidad transparente para darle otros usos. Este material plástico se transforma en granza reciclada de alta calidad que puede ser utilizada en múltiples productos. En concreto, parte se ha destinado a la fabricación equivalente de 271.000 m2 de film de agrupación, que se ha usado para el embalaje de productos Pascual.
Cabe destacar que, la utilización de este recurso reciclado, en vez de virgen, consigue reducir la huella de carbono de la materia prima en un 73% y el consumo de agua, durante la fabricación del mismo, en un 78%. En el caso de Pascual, se utiliza un 50% de granza reciclada y un 50% de granza virgen para el embalaje de los productos de la compañía.
Por último, Pascual, bajo su política de Residuo Cero a Vertedero, y con la ayuda del Grupo Saica, ha valorizado energéticamente 33 toneladas de plástico no reciclable a lo largo del año, generando así 68.227 kWh, energía eléctrica equivalente al consumo de 21 hogares en España para todo un año.