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Cada 19 de agosto se conmemora el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria para rendir tributo a quienes arriesgan sus vidas llevando ayuda humanitaria a millones de personas en todo el mundo en las situaciones más adversas. Las y los trabajadores humanitarios son, a decir del Secretario General de Naciones Unidas, “héroes de carne y hueso” que cumplen un rol fundamental en los momentos más críticos. Durante el 2020 su accionar fue imprescindible ante la crisis sanitaria causada por el coronavirus, pero la realidad no da tregua y hoy continúan siendo esenciales: desde el terremoto en Haití, pasando por la crisis migratoria en Venezuela hasta la reciente ofensiva Talibán en Afganistán. La asistencia humanitaria es vital. En este día, la ONU llama a proteger a estos trabajadores con respeto y sobre todo gratitud.
Trabajadores humanitarios, nuestros héroes sin capa

La ayuda humanitaria es la única forma de sobrevivir para millones de personas. Cada año, el 19 de agosto se celebra el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, que rinde homenaje a aquellos que arriesgan su vida en primera línea para llevar ayuda y proteger a la población civil. La fecha coincide con el atentado en Bagdad de la sede de las Naciones Unidas en 2003. Cuando las crisis se desatan, las vidas de las personas cambian al instante y la ayuda es imprescindible. Pueden suceder en forma de inundaciones, que borran casas y medios de vida en un abrir y cerrar de ojos; o mediante conflictos armados que destruyen familias para siempre.  

Los conflictos en el mundo son de los más variados y complejos. Guerras, catástrofes naturales, dictaduras, violencia organizada y crimen. La lista podría seguir y el común denominador de todos ellos es uno: la necesidad de la asistencia humanitaria. Frente a las situaciones más adversas se encuentran las y los trabajadores humanitarios realizando una tarea fundamental en la protección de derechos humanos. La ayuda humanitaria es la que se brinda a la población víctima de algún conflicto para garantizar el acceso a servicios básicos como alimentación, atención médica, agua o refugio.

En el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, las Naciones Unidas hacen un llamado para centrar la atención en los millones de civiles afectados por los conflictos armados. Su tarea se vuelve cada vez más difícil ya que, a medida que las y los trabajadores humanitarios entregan ayuda y los trabajadores médicos atienden a los heridos y enfermos, se les ataca directamente, se les trata como amenazas y se les impide llevar ayuda y asistencia a quienes los necesitan con desesperación.

Desde siempre la tarea que llevan a cabo estos trabajadores en todos los puntos del globo es clave. Sin embargo, desde el comienzo de la pandemia su misión ha sido aún más importante ya que han respondido –y lo continúan haciendo- a la crisis sanitaria y al enorme aumento de las necesidades humanitarias que ha generado la pandemia. La pérdida de empleo, educación, alimentos, agua y seguridad está llevando a millones de personas al borde del abismo.Las restricciones a la circulación de personas para frenar la propagación del virus han hecho que las comunidades, la sociedad civil y las organizaciones locales, como tantas otras veces, hayan sido las primeras en responder. Son los héroes anónimos de la respuesta a la pandemia, y con frecuencia arriesgan sus vidas para salvar la de otros.

Pero la realidad no da tregua y los conflictos de otros tipos continúan a la par que se propaga el virus. Ellos son los verdaderos héroes de nuestro mundo. Quienes han escogido brindar asistencia en las circunstancias más extremas. Sus historias nos demuestran que los héroes de la vida real tienen una capacidad extraordinaria de perseverar a pesar de los obstáculos y, además, lo hacen con humildad y dedicación.

Las situaciones críticas no cesan en el mundo entero: desde el terremoto en Haití, pasando por la crisis migratoria en Venezuela, los miles de migrantes que arriesgan su vida cruzando el Mediterráneo, hasta la reciente ofensiva Talibán en Afganistán. En todos estos lugares la asistencia humanitaria es imprescindible. Y su importancia es directamente proporcional al peligro que supone para estos trabajadores. En los últimos 20 años se han multiplicado por diez los tiroteos, los secuestros y otros ataques contra las organizaciones humanitarias. Tan solo este año han muerto en zonas de conflicto al menos 72 trabajadores humanitarios según afirma un reporte de la ONU.

El reconocimiento y gratitud para todas esas personas que destinan su vida a ayudar a quienes más lo necesitan en los momentos más difíciles.  La campaña de este año para el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria se centra en la crisis climática, que amenaza los hogares, los medios de subsistencia y las vidas de algunas de las personas más pobres del mundo.

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