Publicado el
Doctor en Ciencias del Trabajo, licenciado en Derecho, Doctor Honoris Causa por la Universidad de Salamanca y por la UCC argentina, patrono de dos fundaciones (Rafael Nadal y Bequal), profesor invitado en varias universidades, conferenciante, escritor, colaborador habitual de Diario Responsable... y, sobre todas las cosas, un gran humanista, este andaluz nacido en Úbeda es un luchador incansable por la defensa de la justicia social. Acaba de publicar su último libro en el que nos invita a reflexionar con sinceridad y "honradez intelectual" acerca de lo que hemos aprendido en esta pandemia y, sobre todo, de lo que, entre todos, debemos hacer para que este mundo sea mejor.

Un año después de publicar "Liderar es educar", Juan José Almagro nos invita de nuevo a reflexionar con otra obra, "Tiempos de Incertidumbre", que agrupa más de 40 artículos publicados a lo largo de un año, además de una reflexión, "Compromiso", donde se recogen los trabajos de la Cátedra de Ética Económica de la Universidad de Comillas, de la que forma parte desde 2019 como profesor doctor. Muchos de los textos están escritos durante la etapa de confinamiento a la que nos obligó la Covid-19.

Almudena Díez.- Has llamado al libro “Tiempos de incertidumbre”, ¿cuál crees que es en este momento la mayor incertidumbre que nos acecha?

Juan José Almagro.- La propia incertidumbre, la única certeza que en este momento tenemos los humanos es la propia certeza de la incertidumbre, no sabemos lo que va a pasar y seguramente tampoco sabremos cómo resolverlo, pero está claro que debemos ponernos a la tarea cuanto antes. Los políticos, por obligación, y la sociedad civil, por devoción y porque la mayor obligación de los seres humanos es conseguir un mundo mejor y obligar a los políticos y a los que nos dirigen a hacer las cosas como deberían, con humildad, decencia, trabajo y ofreciendo esperanza a los ciudadanos que más tarde o más temprano devengan en confianza.

A.D.- ¿Qué no han hecho los líderes?

J.J.A.- La cualidad más importante que debe tener un líder es el ejemplo. Tengo la impresión de que no hemos tenido líderes ejemplares entre los que nos dirigen, singularmente los políticos. Hay un artículo que se llama “Edad proventa y liderazgo” en el que describo las cualidades esenciales del líder y la primera es que debe marcar el camino y hacer que los demás le sigan, debe trabajar, educarse, formarse y ser ejemplar y coherente. A nuestros líderes en todo el mundo les ha faltado humildad para encarar la crisis, les ha faltado prudencia (digo bien prudencia, no imprudencia), es decir, la capacidad de anticiparse para evitar perjuicios y tener el suficiente criterio para considerar que la salud, como el medio ambiente, como la educación, son un bien común y que, por tanto, deberíamos encontrar la fórmula para organizar el prudente disfrute de los bienes comunes por parte de todos, incluidos, naturalmente, los beneficios de las vacunas, y encontrar un modelo de desarrollo que transforme, no que reforme, algunas partes del imperante sistema de economía de mercado.

A.D.- ¿Y en España?

J.J.A.- Necesitamos un nuevo contrato social que transforme a España en un país más decente, mejor, y no podemos resignarnos. Necesitamos conjugar libertad y justicia, que son las columnas de la democracia, para ejercer el derecho y el deber de ser responsables, para hacer oír las voces de los que luchan contra la injusticia social, y para vivir, como dijo Hanna Arent, la libertad de ser libres y, por tanto, iguales.

A.D.- Casi al final del libro lanzas un aviso a navegantes: pedir responsabilidades. Está fechada el pasado mes de mayo. Han pasado ya cuatro meses, ¿mantienes tal cual esa frase o la harías más tajante, más dura?

J.J.A.- Pedir responsabilidades no es más o menos duro, es pedir responsabilidades a los que no han adoptado las medidas necesarias para que la pandemia no se dispare y debemos seguir pidiéndolas, es nuestra obligación como ciudadanos, y dar cumplida información de todo lo que se ha hecho, con transparencia, es también obligación de nuestros gobernantes.

A.D.- ¿Qué te ha movido a escribir este libro?

J.J.A.- Está escrito con honestidad intelectual, y recoge artículos escritos durante un año con singular presencia de los acontecimientos que se han ido produciendo desde finales de marzo a junio, la pandemia y el confinamiento nos ha hecho pensar en muchas cosas y es el momento de desconfinarnos mentalmente, es necesario trabajar por el futuro pidiendo a los dirigentes que nos garanticen una seguridad y pongan las bases para que esto no vuelva a producirse y que nos hablen como adultos.

Me gustaría añadir que el libro está dedicado a Jordi Jaumà Bru, al que tanto quería y quiero, para que nunca olvidemos su tarea y su mayor aspiración: que la justicia social sea pronto una realidad en este mundo.

 

En este artículo se habla de:
NoticiasSocialjusticia socialCovid19

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies