La Comisión Europea ha presentado este miércoles 14 de septiembre una propuesta tendiente a promover, hasta fines de marzo del 2023, una reducción del consumo de electricidad promedio de los países del bloque regional en un 10% y que esa disminución sea de al menos de un 5% en las horas punta; es decir, en los momentos del día en los que la demanda de electricidad se incrementa sustancialmente. El objetivo de esta medida es procurar reducir tanto como sea posible la utilización de centrales de ciclo combinado que funcionan a gas natural como carburante y así evitar el uso de sus reservas para destinarlas a la generación eléctrica.