Es una de las principales conclusiones de la guía práctica “Sostenibilidad y Gestión de Activos”, un documento que persigue asentar las bases para fomentar la adopción de criterios sostenibles en la toma de decisiones de inversión. Realizada por Afi y Allianz Global Investors, analiza las distintas estrategias sostenibles, su impacto en la gestión de riesgos, la alineación con los objetivos del inversor y el alcance de la nueva regulación.