Mucha Ley de Igualdad y mucho hablar de la rentabilidad de la presencia de mujeres a nivel directivo, pero o los hombres se involucran también en la igualdad de género en las empresas o no hay nada que hacer. Involucrar sólo a las mujeres en las estrategias de diversidad de género no es suficiente, y podría ser hasta contraproducente. Entre otras cosas porque puede sonar a feminismo empresarial, y eso, lo siento amigas, tiene poco recorrido.
La semana pasada se celebró en Copenhague la cumbre empresarial sobre cambio climático organizada por el Copenhagen Climate Council, el Pacto Mundial de Naciones Unidas, el World Business Council for Sustainable Development, The Climate Group, Combat Climate Change y la World Economic Forum’s Climate Change Initiative, y con el objetivo de poner en limpio cómo pueden contribuir las empresas a la lucha contra el cambio climático y qué pueden aportar como a la próxima negociación de un tratado que sustituya al Protocolo de Kioto.
CLASIFICACIÓN
1 L’Oréal - 68,5 C+
2 Hermès - 67,9 C+
3 Louis Vuiton - 67 C+
4 Coach - 66,2 C
5 Tiffany - 59,7 D+
6 Swatch - 52,6 D
7 PPR - 51,5 D
8 Richemont - 50, D
9 Bulgari - 37,6 F
10 Tods- 34,9 F
Según señala el informe el grado más alto al que llegó alguna de las empresas de lujo es C+, al que llegaron 3 de las 4 compañías ubicadas en Francia: L’Oreal, Hermes y Louis Viuton. Las compañías ubicadas en Italia se quedaron al final de la tabla clasificatoria (con grado F). Las diez primeras compañías de lujo son las que mostraron los peores desarrollos en reputación, buen gobierno, RSC y medioambiente