En el 2021 la Comisión ya propuso un primer marco regulador de la UE para la IA donde se proponía la clasificación de las distintas aplicaciones y el riesgo de estas para los usuarios, donde diferenciaba entre riesgo inaceptable, alto riesgo o riesgo limitado y siempre prevaleciendo unos requisitos mínimos de transparencia, como el conocimiento de estar actuando con la IA, para que los usuarios puedan tomar decisiones con conocimiento de causa.
La llegada de la IA generativa como chat GPT ha puesto en alerta a grandes corporaciones y se exige esa transparencia sobre uso y contenidos generados por la IA.
El 14 de junio de 2023, los eurodiputados adoptaron su posición negociadora sobre la ley de IA. Ahora comenzarán las conversaciones sobre la forma final de la ley en el Consejo, junto a los países de la UE.
El objetivo es alcanzar un acuerdo a finales de este año.
El enfoque en la sostenibilidad y los datos ESG (ambientales, sociales y de gobierno corporativo) ha ganado una relevancia sin precedentes en el ámbito de la IA. Las empresas son cada vez más conscientes de la necesidad de adoptar políticas sostenibles y aplicar principios ESG en sus operaciones relacionadas con la IA. En este sentido, han surgido leyes y regulaciones que buscan mitigar el impacto ambiental de los centros de datos y promover la igualdad y diversidad en los algoritmos. Estas medidas tienen como objetivo garantizar un desarrollo responsable y sostenible de la IA, protegiendo tanto a las generaciones presentes como futuras.
La ética se ha convertido en un componente fundamental en el desarrollo y aplicación de la IA. Durante este semestre, se han propuesto regulaciones y directrices que buscan establecer un marco ético sólido para la IA. Estas regulaciones abordan temas como la discriminación algorítmica y la necesidad de transparencia en la toma de decisiones. Asimismo, se ha incrementado la investigación para comprender y mitigar los sesgos algorítmicos, garantizando la justicia y evitando la perpetuación de injusticias sociales. La comunidad de la IA está trabajando arduamente para construir una tecnología ética y responsable.
En conclusión, el último semestre ha sido testigo de avances significativos en el campo de la Inteligencia Artificial, así como de un mayor enfoque en la sostenibilidad, los datos ESG y la ética. Desde los asistentes virtuales hasta las aplicaciones médicas, la IA está transformado diversos sectores, mejorando la calidad de vida y abriendo nuevas posibilidades.
La prioridad del Parlamento es garantizar que los sistemas de IA utilizados en la UE sean seguros, transparentes, trazables, no discriminatorios y respetuosos con el medio ambiente. Los sistemas de IA deben ser supervisados por personas, en lugar de por la automatización, para evitar resultados perjudiciales.
Además, se ha reconocido la importancia de adoptar políticas sostenibles y principios éticos para asegurar un desarrollo responsable de la IA. Siguiendo este camino, construiremos un futuro en el que la IA y la humanidad coexistan de manera armoniosa y beneficiosa para todos.
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