Cada día se hacen más evidentes los saltos extremos en las condiciones climáticas que el mundo experimenta. Recientemente todos hemos leído sobre la oleada de frío que sacude a Estados Unidos y que ha llegado a alcanzar temperaturas de -36°C.
Irónicamente, al otro lado del planeta, la ciudad australiana de Sídney ha registrado su clima más cálido en los últimos 79 años con temperaturas record de 47,3°C. Estas alarmantes cifras deberían ayudarnos a despertar el interés colectivo en las tendencias climáticas.
Es lamentable que muchas veces pensemos en la meteorología solo como una herramienta que nos puede ayudar a seleccionar el atuendo más adecuado para hacer frente al día que se avecina, dejando a un lado su propósito fundamental que es alertar sobre la aparición de fenómenos climáticos que pueden tener alto impacto en el planeta y, por ende, en nuestras vidas.
Aunque resulta algo osado realizar pronósticos del tiempo a mediano plazo, Altocúmulo ha intentado dar lectura a los principales parámetros que definen los cambios climáticos, tales como: la temperatura, la humedad, la presión atmosférica, el viento y las precipitaciones, esto con el propósito de dar a conocer cuáles serán las tendencias climáticas para el año que acaba de empezar.
El 2018 será un año relativamente cálido a nivel mundial. Los pronósticos apuntan que la temperatura promedio global oscilará entre máximas de 1,12°C y mínimas de 0,88°C, con una estimación central de 1,00 °C, lo que representan 0,40°C por encima del promedio real registrado en el periodo de 1981 a 2010.
Evidentemente, estas estimaciones no contemplan eventos impredecibles como erupciones volcánicas de gran magnitud que causarían un enfriamiento temporal en las condiciones climáticas del planeta. Particularmente debemos monitorear la actividad del estratovolcán Gunung Agung situado en la Isla de Bali en Indonesia, el cual en el pasado reciente ha tenido erupciones bastantes modestas y cuya reactivación podría modificar completamente el panorama climático del 2018.
El análisis de diferentes factores meteorológicos indica que la Región del Pacífico seguirá siendo afectada por la tormenta tropical de intensidad moderada, conocida como La Niña, la cual ha sido originada debido a las emisiones de gases de efecto invernadero y ha ocasionado la alteración de los ciclos climáticos.
Los profesionales de Altocúmulo consideran que estas atípicas precipitaciones podrían causar estragos en caso de prolongarse hasta el mes de Marzo, ya que darían continuidad a los tradicionales períodos de lluvia que suelen afectar a la región del pacífico y que van desde el mes de Abril hasta el mes de Noviembre.
Las evidencias también indican que continuará el rápido descenso de las presiones atmosféricas en Estados Unidos y Canadá por lo que se agudizará la situación del gélido invierno que en la actualidad gran parte de esta región experimenta.
Se pronostican abundantes precipitaciones y temperaturas inferiores al promedio histórico, particularmente acentuadas en la costa este de Norteamérica. Por otro lado, se esperan climas más templados y extensos períodos de sequía al sur de Estados Unidos.
La región de Europa Occidental también se verá afectada por la acción del fenómeno La Niña. Ésta tormenta tropical ocasionará una modificación de los patrones climáticos convencionales al evitar el flujo de las corrientes de aire suave desde el Atlántico hacia Europa, generando un invierno más frío y prolongado de lo habitual.
Además, se espera una mayor Oscilación de las presiones atmosféricas del Atlántico Norte (NAO), lo que incrementará las posibilidades de aparición de tormentas en esta zona.
Debido al deterioro de la capa de hielo sobre Groenlandia, se prevé un cambio en la Circulación de Retorno del Atlántico Norte (AMOC). Este fenómeno afectará el ciclo climático de Europa Meridional; el cambio en la corriente oceánica producirá una disminución de las temperaturas y un incremento en la intensidad de las lluvias y borrascas que afectarán a la región.
Después de considerar diferentes modelos de simulación matemática para analizar la información disponible sobre las tendencias históricas de las temperaturas oceánicas, la velocidad de los vientos y las presiones atmosféricas, el equipo de Altocúmulo considera bastante probable que en el corto plazo la temperatura del Pacifico Central y Oriental continúen disminuyendo, lo que afectará la estación de invierno en Hong Kong y gran parte del Continente Asiático.
Estas eran las previsiones meteorológicas para el 2018 según el estudio realizado por el equipo de Altocúmulo. Cada año más, el tiempo es algo más imprevisible y complicado, así que esperamos que estas indicaciones, aunque no totalmente ciertas, puedan ayudaros.