Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) representan un consenso internacional en torno a las cuestiones medioambientales, sociales y económicas mundiales más acuciantes, que de un modo u otro incumben y afectan a todos los países. De acuerdo con los Principios de Inversión Responsable (PIR), la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (CNUCYD) estimó que, para lograr los ODS, serán necesarios entre 5 y 7 billones de dólares estadounidenses anuales hasta 2030.
Como profesionales de la inversión, tenemos la responsabilidad de velar por las futuras generaciones. Ello pasa por proteger sus futuros activos, revalorizar su capital y esforzarnos por dejarles un lugar mejor y un mundo más seguro. Podemos hacerlo invirtiendo en empresas, no sólo en aquellas con las mejores notas en criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG), sino también en las que adopten los ODS como estrategia fundamental.
Tenemos claro que este es el camino que hay que seguir. El apetito de inversión sostenible está creciendo como la espuma. Nuestros clientes reconocen la importancia de invertir en empresas con la mayor calidad de gobierno, que cuiden de su personal y adecuen sus estrategias a nuevos condicionantes y normativas. La sostenibilidad no es una moda, sino una realidad que debemos considerar en la asignación de activos.
Entender la repercusión del cambio climático así como las premisas de la inversión sostenible es crucial para lograr rentabilidad en años venideros. Si bien aún queda quien discute la cientificidad del cambio climático, la repercusión de las catástrofes naturales en el mundo entero irá a más y acabará por afectar significativamente a distintas economías.
El mundo está experimentando cambios profundos y nos encaminamos a la fase final del actual período industrial. La disrupción que causan nuevas tecnologías como baterías o energías renovables, materiales inteligentes, etc., no dejará margen para empresas reacias a reconocer tales cambios. La inadecuación a nuevas normativas puede tener un efecto inmediato en los beneficios y la rentabilidad de los accionistas.
La calidad y la sostenibilidad a la hora de invertir serán factores fundamentales para rendir por encima del mercado. Y nuestros clientes quieren contribuir a forjar nuestro futuro invirtiendo de una forma responsable como ilustra el interés en auge de la banca por la inversión sostenible y responsable.
Carole Millet y Manuel Terreault, Asesores de Inversiones senior de SYZ AM