Pero en materia de innovación aún queda mucho por hacer. Como dice el estudio “2033: compitiendo en innovación”, de PWC, “para estar en esa primera división mundial es necesario ser muy competitivo y el motor de esa competitividad es la innovación”.
Pascual ha hecho de la innovación su seña de identidad, desde su fundación en 1969, reinventándose cada año. El pasado 2016, volvimos a ser pioneros en el sector agroalimentario siendo la primera empresa en apostar por la innovación abierta y colaborativa.
La primera edición de los Premios Pascual Startup superó sus propias expectativas con más de 250 candidaturas presentadas y marcó un antes y un después al ser una iniciativa sin precedentes en una de las principales palancas económicas de nuestro país, la industria alimentaria.
Hoy en día, el entorno en el que nos encontramos se caracteriza por los cambios que se suceden a una velocidad de vértigo y ahí es donde es clave apostar por la innovación. La tecnología nos permite conocer a nuestros clientes, a los consumidores. Lo que está en nuestra mano es “escucharles” y atender sus demandas y necesidades. Esto marcará la diferencia entre sobrevivir o no en este nuevo panorama empresarial.
Un nuevo escenario en el que las startup están revolucionando el mercado y la cultura en general y serán el motor de la nueva sociedad. En Pascual creemos que la innovación pasa por la inteligencia colectiva. Apoyar el emprendimiento para nosotros es apoyar la innovación, la pasión, la calidad y el esfuerzo, valores intrínsecamente ligados a la historia de nuestra compañía.
La innovación está cambiando sustancialmente la forma en que marcas y consumidores construyen sus relaciones. Es sabido que múltiples pequeñas empresas, startups, están descubriendo atajos innovadores en todo tipo de negocios. Ofrecen perspectivas inéditas gracias a las que han empezado a atraer a clientes, a relacionarse con ellos y a ofrecerles servicios tan disruptivos como diferenciales.
Hay sectores como la alimentación, donde se han dado menos pasos, y donde a la vez hay más oportunidades de colaboración. En Pascual seguimos creyendo en la descentralización de la innovación en el sector agroalimentario y este año queremos llevarlo al máximo nivel, queremos ser ‘padrinos de sus ideas’.
Según la primera acepción de la Real Academia de la Lengua Española (RAE), apadrinar significa “patrocinar, proteger", mientras que emprendedor es aquel “que emprende con resolución acciones o empresas innovadoras”. En la segunda edición de los Premios Pascual Startup vamos un paso más allá en el emprendimiento colaborativo y queremos que el ganador de una de las tres categorías sea elegido por votación popular a través de la campaña la sociedad nos ayude a reflexionar y elegir a través de #ApadrinaUnEmprendedor.
Con esta iniciativa serán los ciudadanos quienes decidan a qué startup ayudará Pascual, entre los tres finalistas de la categoría de ‘Medioambiente’. ¡Y es que no se nos ocurre nada más colaborativo que la participación ciudadana!
Las empresas debemos estar comprometidas con la sociedad, estando al lado de las personas y apoyando las pequeñas ‘grandes’ ideas. La innovación no se basa solo en la creación y el lanzamiento de nuevos productos y formatos, sino que se traslada a todos los procesos clave de las compañías. Y para ello, tenemos la posibilidad de apoyarnos en las startup, que son empresas que nos ofrecen perspectivas inéditas, disruptivas y diferenciales que permiten aportar valor a la sociedad.
Como dice Guy Kawasaki, “las ideas son fáciles, implementarlas es lo difícil”. En el sector agroalimentario, hay muchas iniciativas que requieren apoyo, ser creídas y escuchadas por las empresas y ese es el foco de Pascual Startup.
Queremos ser un impulso para que los emprendedores puedan conseguir el éxito con sus tendencias disruptivas. Y con esta segunda edición, ¡estamos a un solo paso de hacer algo muy grande!
Álvaro Bernad, director de Innovación Disruptiva y Desarrollo de Negocio de Calidad Pascual