Las baterías sostenibles juegan un papel crucial en la transición hacia un futuro más limpio y respetuoso con el medio ambiente. Estas baterías están diseñadas para minimizar el impacto negativo en el entorno y en la sociedad en comparación con las tecnologías de baterías tradicionales. Algunas razones por las cuales las baterías sostenibles son importantes para el planeta son:
Conscientes de todo lo anterior, desde el pasado 17 de agosto, la Unión Europea ha puesto en marcha una nueva ley para garantizar que las baterías se recojan, reutilicen y reciclen en Europa. El nuevo Reglamento sobre baterías garantizará que, en el futuro, las baterías tengan una baja huella de carbono, utilicen sustancias nocivas mínimas, necesiten menos materias primas de países no pertenecientes a la UE y se recolecten, reutilicen y reciclen en gran medida en Europa. Esto apoyará el cambio hacia una economía circular, aumentará la seguridad del suministro de materias primas y energía, y mejorará la autonomía estratégica de la UE.
Cabe destacar que, en línea con las ambiciones de circularidad del Pacto Verde Europeo, el Reglamento sobre baterías es la primera legislación europea que adopta un enfoque de ciclo de vida completo en el que el abastecimiento, la fabricación, el uso y el reciclaje se abordan y consagran en una sola ley.
Las baterías son una tecnología clave para impulsar la transición ecológica, apoyar la movilidad sostenible y contribuir a la neutralidad climática para 2050. A tal fin, a partir de 2025, el Reglamento introducirá gradualmente requisitos de declaración, clases de rendimiento y límites máximos sobre la huella de carbono de los vehículos eléctricos, los medios de transporte ligeros (como las bicicletas eléctricas y los scooters) y las baterías industriales recargables. Por su parte, el Reglamento sobre pilas garantizará que las pilas introducidas en el mercado único de la UE solo puedan contener una cantidad restringida de sustancias nocivas que sean necesarias. Las sustancias preocupantes utilizadas en las baterías se revisarán periódicamente.
Los objetivos de eficiencia de reciclaje, recuperación de materiales y contenido reciclado se introducirán gradualmente a partir de 2025. Todas las baterías de residuos recogidas tendrán que reciclarse y se tendrán que alcanzar altos niveles de recuperación, en particular de materias primas críticas como el cobalto, el litio y el níquel. Esto garantizará que los materiales valiosos se recuperen al final de su vida útil y se recuperen en la economía mediante la adopción de objetivos más estrictos para la eficiencia del reciclaje y la recuperación de materiales a lo largo del tiempo.
A partir de 2027, los consumidores podrán retirar y reemplazar las baterías portátiles de sus productos electrónicos en cualquier momento del ciclo de vida. Esto prolongará la vida útil de estos productos antes de su eliminación final, fomentará la reutilización y contribuirá a la reducción de los residuos posconsumo. Además, con el objetivo de ayudar a los consumidores a tomar decisiones informadas sobre qué baterías comprar, los datos clave se proporcionarán en una etiqueta. Un código QR proporcionará acceso a un pasaporte digital con información detallada sobre cada batería que ayudará a los consumidores y especialmente a los profesionales a lo largo de la cadena de valor en sus esfuerzos por hacer de la economía circular una realidad para las baterías.
Bajo las obligaciones de diligencia debida de la nueva ley, las empresas deben identificar, prevenir y abordar los riesgos sociales y ambientales relacionados con el abastecimiento, procesamiento y comercialización de materias primas como litio, cobalto, níquel y grafito natural contenido en sus baterías. El aumento masivo previsto de la demanda de baterías en la UE no debería contribuir a un aumento de tales riesgos medioambientales y sociales.