La emergencia climática ya es casi irreversible. Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes y las pérdidas económicas también. La Organización Meteorológica Mundial ha publicado el pasado viernes 21 de abril el informe “Estado del clima mundial 2022”, el cual se centra en los principales indicadores climáticos: gases de efecto invernadero, temperaturas, aumento del nivel del mar, calor y acidificación de los océanos, hielo marino y glaciares. También destaca los efectos del cambio climático y las condiciones meteorológicas extremas.
Los expertos muestran un panorama ciertamente preocupante. El documento muestra los cambios a escala planetaria en la tierra, el océano y la atmósfera causados por los niveles récord de gases de efecto invernadero que atrapan el calor. En cuanto a la temperatura global, los años 2015-2022 fueron los ocho más cálidos de los que se tiene constancia, a pesar del enfriamiento provocado por La Niña en los últimos tres años. El deshielo de los glaciares y la subida del nivel del mar, que volvió a alcanzar niveles récord en 2022, continuarán hasta dentro de miles de años.
En palabras de Petteri Taalas secretario general de la Organización Meteorológica Mundial: “Mientras las emisiones de gases de efecto invernadero siguen aumentando y el clima continúa cambiando, las poblaciones de todo el mundo siguen sufriendo el grave impacto de fenómenos meteorológicos y climáticos extremos”.
Petteri Taalas ha explicado que, en 2022, la sequía continua en África oriental, las precipitaciones récord en Pakistán y las olas de calor sin precedentes en China y Europa afectaron a millones de personas, provocaron inseguridad alimentaria, impulsaron la migración masiva y costaron miles de millones de dólares en pérdidas y daños.
El informe analiza en profundidad los impactos del calentamiento global, entre los que se destacan:
En este escenario, el documento concluye que es urgente acelerar el ritmo en búsqueda de soluciones. Al respecto, el Secretario General de la ONU recuerda que existen las herramientas, los conocimientos y las soluciones. “Pero debemos acelerar el ritmo. Necesitamos una acción climática acelerada con reducciones de emisiones más profundas y rápidas para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados centígrados”.