Publicado el
La entidad financiera ha decidido terminar con el excedente alimentario de Ciudad BBVA, su sede corporativa en Madrid, provocando un impacto positivo en la comunidad. Lo hará de la mano de Sodexo, empresa de restauración que presta sus servicios en BBVA, y con la colaboración de Oreka Circular Economy.

El desperdicio de alimentos no sólo supone un problema de contaminación ambiental, sino que, además, bien gestionado puede ser utilizado en propuestas solidarias. La FAO define el desperdicio alimentario como aquellos alimentos aptos para el consumo que son descartados o no llegan a ser consumidos pese a su buen estado. Según datos de Naciones Unidas, cada familia en España desperdicia de media 77 kilos de comida al año. Reducir el desperdicio alimentario puede tener un importante impacto ambiental y es además una de las metas establecidas en el ODS 12 para garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.

En España, las empresas o particulares que quieren donar sus excedentes deben hacerlo a través de una organización que garantice la seguridad y la cadena de frío de los productos. BBVA ha decidido terminar con el excedente alimentario de Ciudad BBVA, su sede corporativa en Madrid, provocando un impacto positivo en la comunidad. De la mano de Sodexo, empresa de restauración que presta sus servicios en BBVA, y con la colaboración de Oreka Circular Economy, la entidad bancaria aprovecha los excedentes generados en los comedores de sus oficinas y los distribuye al final de cada jornada a entidades sociales de Madrid.

Concretamente, la solución tecnológica desarrollada por Oreka trata precisamente ese doble problema: la falta de alimentos en los hogares y el desperdicio de alimentos a través de este sistema circular de donación de excedentes alimentarios. Los alimentos se recogen durante los cinco días laborales y se redistribuyen primando el consumo en el mismo día, para garantizar su calidad e higiene. Todo el excedente que recuperan desde Oreka va dirigido íntegramente a comedores sociales. “Localizamos las entidades receptoras con la ayuda de Banco de Alimentos de Madrid. Tratamos de garantizar que esos centros receptores tengan la capacidad de recibir, almacenar y consumir esos alimentos recibidos con total seguridad, y para ello les formamos para que puedan empezar a recibir alimentos”, explica Denis Ugalde, fundador de Oreka.

Los diferentes servicios de restauración disponibles en Ciudad BBVA ofrecen cerca de 3.500 menús de promedio al día, entre desayunos y comidas. Durante los seis primeros meses de la puesta en marcha de la iniciativa con Oreka, el banco ha donado más de 500 kilos de alimentos en más de 3.000 raciones de comida. El proyecto ha permitido además identificar mejoras en la gestión de la restauración de los comedores de la sede del banco. El centro beneficiado por estas donaciones es el comedor social San Juan Bautista de la Orden de Malta, donde diariamente comen más de 300 personas. 

Desirée Grande, responsable global de Inmuebles y Servicios en BBVA, expresa que: “Esta nueva iniciativa es un paso más en nuestra apuesta por ser una entidad verde, más eficiente y ayudar además a los que más lo necesitan. Este proyecto de economía circular nos permite ser más sostenibles y sentirnos más cerca de la comunidad de la que formamos parte”.

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies