El Instituto de Recursos Mundiales (WRI por sus siglas en inglés) es una organización mundial, no gubernamental, de investigación, que busca crear condiciones de equidad y prosperidad a través de la administración sostenible de los recursos naturales. La entidad, ha publicado un informe en el que destaca la gran importancia de que las administraciones inviertan en construir una economía oceánica sostenible.
Antes de la pandemia de la COVID-19, los pronósticos sugerían que la economía oceánica podría proporcionar grandes oportunidades de crecimiento económico durante el próximo decenio, creando 3 billones de dólares anuales en valor añadido bruto para 2030. Sin embargo, pese a las cifras contundentes de diversas investigaciones, las inversiones en la economía oceánica son drásticamente bajas. Sólo el 1% del valor total de la economía oceánica se invirtió en proyectos sostenibles a través de la filantropía y la asistencia oficial para el desarrollo en los últimos diez años.
Es sabido que los océanos se encuentran en una situación realmente crítica. Los efectos del cambio climático, la contaminación y la pesca excesiva ejercen una presión cada vez mayor sobre el océano, su capital natural y los servicios que presta. Para cambiar esta compleja situación, es imperativo que haya inversiones destinadas a aumentar la capacidad de recuperación de los océanos y a reducir al mínimo los riesgos oceánicos mediante la restauración, la protección y la gestión eficaz de la forma en que los seres humanos utilizan los ecosistemas oceánicos.
Expertos del Instituto de Recursos Mundiales sostienen que replantearse fundamentalmente la forma en que los seres humanos interactuamos con el océano y transformar en consecuencia los modelos económicos y los sistemas de mercado, es un paso fundamental para frenar el deterioro de la salud de los océanos, detener la pérdida de biodiversidad y aprovechar al mismo tiempo todo el potencial económico del océano. La disponibilidad de financiación adicional será fundamental para hacerlo eficazmente y lograr una economía oceánica sostenible.
Los expertos apuntan a los beneficios de invertir en la transición hacia una economía oceánica sostenible. Investigaciones recientes encargadas por el Panel de Alto Nivel para una Economía Oceánica Sostenible muestran que invertir 1 dólar en acciones oceánicas clave puede producir al menos 5 dólares en beneficios globales. Las inversiones basadas en los océanos son también una de las formas en que los encargados de formular políticas públicas pueden asegurar una recuperación económica sostenible y equitativa de COVID-19. Además de los beneficios económicos, una economía oceánica sostenible proporciona un innumerable valor no material, como el de servir de fuente de identidad social y cultural.
En este sentido, el Instituto de Recursos Mundiales afirma que cada vez se tiene más conciencia de que si no se hace la transición a una economía oceánica sostenible, los costos serán elevados. Por ejemplo, el cambio climático no mitigado podría causar pérdidas de ingresos por turismo en los arrecifes de coral de más del 90%. A pesar del inmenso valor que tiene la creación de una economía oceánica sostenible, existe un importante déficit de financiación en la lucha por proteger la biodiversidad y, por extensión, asegurar el uso sostenible y la conservación de los recursos oceánicos.
En un informe encargado por el Panel Oceánico se señalan siete medidas clave para revertir el déficit de financiación azul y asegurar al mismo tiempo la distribución equitativa de los beneficios de una economía oceánica sostenible.
Para garantizar una economía oceánica sostenible y recibir todos los beneficios que ésta conlleva es necesario aumentar considerablemente la financiación sostenible de los océanos. El océano encierra una inmensa oportunidad para las sociedades y una riqueza de recursos para los miles de millones de personas que dependen de él. La eliminación de los obstáculos a la financiación de una economía oceánica sostenible y las inversiones en ella contribuirán a garantizar que los beneficios del océano estén al alcance de todos.