Al adoptar estos principios propuestos por la ONU, MAPFRE se compromete a respetar los derechos humanos en todo momento de los miembros de la comunidad, los trabajadores y los clientes LGBTI; eliminar la discriminación contra los empleados LGBTI y prestar apoyo al personal LGBTI en el lugar de trabajo; no discriminar a los clientes, proveedores y distribuidores LGBTI; y defender los derechos humanos de estas personas en las comunidades donde desarrollan su actividad.
Las Normas de Conducta se fundamentan en los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos y en el Pacto Mundial, y ofrecen orientación a las empresas sobre cómo cumplir su responsabilidad de respetar los derechos de todos, en este caso, los derechos de las personas LGBTI.
Con su adhesión a las Normas, MAPFRE da un paso más en su compromiso con los derechos humanos, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS 10- Reducción de las desigualdades), la diversidad y la igualdad de oportunidades, en esta ocasión, en relación con la orientación sexual de las personas.
Dicho compromiso con los derechos humanos está recogido en los Principios Institucionales, Empresariales y Organizativos de MAPFRE y, de forma expresa, en el Código Ético y de Conducta y en la Política de Responsabilidad Social Corporativa actual.