Al participar en esta campaña, Unilever asume un compromiso mucho más ambicioso de los que se incluyen en el Acuerdo de París de cara a lograr la reducción del uso del carbono en 2050. La campaña se ha puesto en marcha gracias al Pacto Mundial de la ONU para que el sector privado presione a las instancias políticas a adoptar compromisos firmes para mitigar los efectos del cambio climático.
Unilever ha condicionado su crecimiento al respeto por el medio ambiente a través del Plan Unilever para una Vida Sostenible, que se puso en marcha en 2010 y del que ya se han logrado más del 80% de los objetivos. En materia de emisiones, gracias a este plan la compañía ha reducido en la última década un 52% las emisiones de gases de CO2 proveniente de la energía que utiliza por cada tonelada de producción.
Estos avances tienen especial repercusión en España, donde la compañía también ha logrado rebajar las emisiones de CO2 en los procesos de producción. Es el caso de la fábrica que Unilever tiene en Leioa (País Vasco), especializada en la elaboración de salsas para Hellmann’s y Calvé, y que en los últimos cinco años ha reducido un 38% las emisiones de dióxido de carbono. Además, la misma planta ha conseguido reducir el consumo de agua un 32% en el mismo periodo.
Según Ana Palencia, la directora de Comunicación de Unilever España: “El compromiso de Unilever por la sostenibilidad viene de lejos, la firma de este acuerdo con la ONU es un paso más en la línea de integrar el respeto por el medio ambiente a nuestro crecimiento. La reducción de la huella de carbono es, juntamente con el desarrollo de envases 100% reciclables, reutilizables y compostables, uno de los principales pilares del Plan Unilever para una Vida Sostenible en materia de medio ambiente”.