Y pone como ejemplo un dato que aparece en el estudio que acaba de presentar Canvas Estrategias Sostenibles junto con Corporate Excellence: los bulos, las noticias que no son verdad, han aumentado un 365% este año. Explica que hablar de los bulos en las redes sociales plantea un dilema ético “porque por un lado está la responsabilidad de los propietarios de las redes sociales, que hasta ahora no han asumido, y por otro lado, de las empresas y de las personas que leen esas noticias”. Y cita una frase de la filósofa Adela Cortina, “la verdad existe, pero cómo encontrarla”. Así, cree que hay que exigir a las empresas dueñas de las redes sociales una mínima responsabilidad sobre los contenidos que suben a sus plataformas y a la vez hay que dotar al ciudadano, al consumidor, al lector de mecanismos para conseguir saber si la noticia que lee es o no verdad. “De hecho, en nuestro informe Aproaching the Future, aportamos el dato de que un 63% no sabe si lo que lee es verdad o un rumor”, algo que la deja ”un poco perpleja” porque si tú no eres capaz de definir si lo que estás leyendo es verdad o no, ¿cómo vas a tomar una decisión?, “y desde el punto de vista de una organización, ¿cómo vas a generar una credibilidad?, ¿qué tipo de mensajes voy a tener que transmitir si hay tantas personas que no van a saber si lo que estoy contando es verdad?”
Argumenta que la única defensa posible es “generar confianza” porque otro dato del estudio es que “estamos en la era de la híper transparencia. Nos guste o no, ahora mismo las compañías están como en una pecera en la que todos podemos ver qué tipo de peces hay”.
En su opinión, la única manera es generar una credibilidad que pasa por el propósito de las organizaciones, “definirlo claramente y explicarlo muy bien, que no es tanto lanzar comunicaciones a diestro y siniestro sino que la comunicación sea muy creíble, contar tanto éxitos como fracasos y explicando su porqué”. Antes te preguntaban qué haces y cómo lo haces, la misión y la visión, “ahora el sentido es algo que va más allá, más profundo, el propósito, qué papel quieres jugar, no eres una isla, estás dentro de una sociedad que te va exigiendo unas demandas sociales que ahora mismo nadie está cubriendo”.
Aunque está de acuerdo con que el movimiento BCorp está asumiendo aquí un papel importante, “hay organizaciones que antes de que surgiera ya estaban empezando a replantearse y a definirlo, incluso en algunos casos lo están haciendo en colaboración con los empleados”. Y advierte que “no tenemos que confundirlo con buenismo, porque entonces sería como una pompa de jabón que desaparecerá.
En su caso, el propósito de Canvas Estrategias Sostenibles “es generar conciencia en las organizaciones para integrar todos estos temas de los que estamos hablando en la propia gestión”.
El estudio también revela que, a nivel mundial, los medios de comunicación digitales tienen muy poca credibilidad y cree que es porque “ todo lo digital parece que suena a efímero y entonces la gente tiende a no creerlo tanto”. Sin embargo, “la reputación es todo lo contrario a efímera. No se consigue de un día para otro. Se basa en los comportamientos de las organizaciones y las personas a lo largo del tiempo. Es más, la reputación es un magnífico escudo contra las crisis si sabes gestionarla”.
Hay otra afirmación contundente en el informe y es que las organizaciones lideradas por mujeres, en general, se comportan de forma más ética y sostenible. Esto plantea una pregunta casi obvia: ¿el mundo iría mejor si hubiera más mujeres dirigiendo? “Por supuesto, totalmente de acuerdo, y en el estudio salen datos que así lo aseveran”. Isabel López Triana defiende con pasión que as compañías lideradas por mujeres son mucho más sensibles a la gestión de la sostenibilidad desde el punto de vista del medio ambiente, posicionamiento frente al cambio climático, trabajan más los Objetivos de Desarrollo Sostenible, etc. “pero esto no es una guerra entre hombres y mujeres, sino un problema común que tenemos que aprender desde la escuela”.