Publicado el
La efeméride del Día Mundial del Agua coincide este año en España con una época lluviosa que nos lleva a creer que disfrutamos de un suministro abundante. Sin embargo, esta percepción puede llevarnos a ignorar los verdaderos desafíos que enfrentamos para gestionar de manera eficiente este recurso esencial durante el resto del año.
La Ciencia de los Datos en la gestión del ciclo del agua

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en España se pierde aproximadamente el 15,4% del agua suministrada debido a fugas, roturas y averías, lo que supone una pérdida anual de 652 hectómetros cúbicos. La reducción de estas pérdidas y una gestión proactiva de las incidencias permitirían disminuir significativamente el desperdicio hídrico, atendiendo así a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos en la Agenda 2030, suscrita por España.

Cómo la IA y la analítica avanzada mejoran la eficiencia en la gestión del agua

En este contexto, tanto el sector público como los operadores de servicios hídricos se enfrentan a un importante desafío: optimizar la gestión del ciclo integral del agua. Para ello, la implementación de soluciones tecnológicas avanzadas, como la inteligencia artificial y la analítica predictiva, se presenta como una oportunidad estratégica. Estas tecnologías permiten aumentar notablemente la eficiencia operativa, anticipar y solucionar problemas con mayor rapidez, y contribuir directamente a la sostenibilidad ambiental.

No son simplemente palabras; el caso de Aqualia lo demuestra claramente. La incorporación de inteligencia artificial y analítica avanzada ha facilitado una mejor toma de decisiones basada en datos fiables y oportunos, algo esencial para reducir pérdidas, mejorar la calidad del servicio y avanzar hacia un modelo más sostenible y responsable en el uso de recursos hídricos. Y estamos hablando de la cuarta empresa europea de gestión del agua por población atendida, y que destaca especialmente en este ámbito, ya que, mediante sensores, análisis de datos y sistemas de monitorización en tiempo real, ha logrado detectar y resolver fugas en fases tempranas.

Gracias a un modelo predictivo del caudal, que estima con precisión el consumo de agua, y el modelo de detección de anomalías, diseñado para anticipar posibles roturas, fugas o consumos inusuales; se pueden reducir considerablemente el Agua No Registrada (ANR), los costes asociados a las reparaciones y el impacto ambiental.   

Asimismo, la implementación de la analítica avanzada, el machine learning y la inteligencia artificial demuestran el increíble potencial de la innovación aplicada a la gestión sostenible del agua. Por ejemplo, para anticiparse a fugas o averías, mejorar el rendimiento hídrico hasta un 8% y conseguir un incremento en la eficiencia operativa. Se trata, sin duda, de tecnología puesta al servicio del Medio Ambiente que empodera a los técnicos con datos objetivos que superan la simple intuición y la experiencia tradicional.

En este Día Mundial del Agua, resulta esencial reconocer la importancia de continuar avanzando en soluciones innovadoras que promuevan un uso más consciente, eficiente y responsable del recurso más valioso del planeta. En ese sentido, la analítica avanzada no es solo una herramienta tecnológica: es un camino claro hacia la sostenibilidad y la protección del agua para las generaciones futuras.

En este artículo se habla de:
OpiniónDía mundial del agua

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies