Nos encontramos a unos días de dar comienzo la cita anual más importante del mundo en cuanto a la lucha contra el cambio climático se refiere, y que este año, además, implica un momento clave para al sector de la alimentación, gracias a la presencia por primera vez de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) con un pabellón oficial para poner sobre la mesa la transformación de los sistemas agroalimentarios.
Desde Violife, marca líder mundial de alternativas veganas al queso, no podemos más que celebrar este primer paso de poner en el debate político y público la importancia de llevar a cabo de una transición alimentación justa y respetuosa para todos. Según la FAO, su objetivo en esta cumbre es promover una comprensión compartida de los problemas alimentarios y agrícolas más apremiantes que enfrentan las personas y el planeta, además de compartir conocimientos y soluciones innovadoras.
En este sentido, desde Violife promovemos el consumo de alternativas vegetales al queso como una manera de incorporar en nuestra dieta habitual alimentos con un menor impacto climático con un pequeño gesto, sin tener que realizar una dieta estrictamente vegetariana o vegana. En concreto, en un análisis del ciclo de vida del queso lácteo en comparación con nuestras alternativas, en la que se analizó el impacto ambiental y climático y el uso de la tierra, se reveló que si las personas se cambiasen al queso de origen vegetal podrían reducir su impacto climático en al menos un 50%[1].
Por entender el impacto de cada una de las variedades más populares, como manchego, cheddar, mozzarella, feta y parmesano, estas producen entre 6,4 y 13,3 kg[2] de dióxido de carbono (eq) por kilo durante su ciclo de vida, según el estudio de la consultora de sostenibilidad Quantis. En comparación, los impactos climáticos de las alternativas veganas como Violife son sustancialmente más bajos y generan como mínimo 3,8 kg menos de carbono 11 por kilo, el equivalente a conducir un automóvil 11 km.[3]
Unas cifras que, si extrapolamos a todas las categorías de alimentos plant-based, demuestran aún más la verdadera importancia de impulsar una transición alimentaria hacia estos alimentos para mejorar la salud del planeta y de las personas que lo habitan. De hecho, si el conjunto de la sociedad española siguiera una dieta basada en vegetales durante un año, podrían ahorrarse alrededor de 1,7 billones de litros de agua, 10 millones de hectáreas de tierra y más de 62 millones de toneladas de CO2 al año, según el informe “Más allá de la carne” de ProVeg.
Por todo ello, desde Violife, esperamos que durante las conversaciones sobre la transformación de los sistemas agroalimentarios que tendrán lugar los próximos días entre los principales mandatarios del mundo, éstos tengan en cuenta la importancia de las alternativas vegetales y el sector plant-based como clave en la lucha contra el cambio climático. Porque los recursos de los que disponemos son limitados y es deber de todos protegerlos mediante nuestras decisiones de alimentación.
[1] Resumen medioambiental de Violife – Europa, abril de 2022, p.4
[2] Violife 100% vegan alternative to cheese vs. dairy cheese in Europe, UK, US, Canada and Japan Life Cycle Asessement Technical Summary, abril de 2022, p. 5
[3] Resumen medioambiental de Violife – Europa, abril de 2022, p.4