Es necesario recalcar que el uso de las TIC en las ONL no debe reducirse a la web y el correo electrónico. Hay que pensar en nuevas herramientas de oficina virtual, y el reto es básicamente una cuestión de formación. En este sentido, la Fundación iwith.org organiza cursos on-line fáciles de seguir sobre la gestión de las actas de las reuniones, la gestión de proyectos o la gestión del voluntariado, que implican ir un paso más allá en soluciones ajustadas a las ONLs de fácil manejo, pero para las cuales se requiere una pequeña capacitación.
Según el estudio spacexchange sobre Estrategia de Captación de Recursos elaborado por SIGMA y el Centro de Investigación IRCO del IESE Business School, las organizaciones no lucrativas se sirven habitualmente de las TIC. El 72% de ellas utilizan el correo electrónico y disponen de una página web, aunque muy pocas disponen de contenidos dinámicos que sirvan para interactuar con sus distintos stakeholders (socios, donantes, empleados, voluntarios, medios de comunicación, instituciones, etc). Aunque este estudio señala que el 67% de las ONLs posee una base de datos informatizada, la gran mayoría (un 70%) la usa sobre todo para la gestión administrativa o para enviar información a los miembros de la organización. En menor medida, las organizaciones utilizan las TIC para realizar campañas de captación de recursos o recoger información relevante que pueda permitir personalizar la comunicación y fidelizar a sus usuarios, socios, donantes, voluntarios, etc.
A diferencia de las empresas, es poco o nada habitual el uso de las TIC para compartir el conocimiento con otras organizaciones, nacionales o internacionales, o para trabajar en red. Las organizaciones no lucrativas deberían potenciar más el uso de las TIC como herramienta que potencie la innovación dentro de la organización (a través de la gestión del conocimiento de sus empleados, voluntarios, socios, donantes, etc.), que ayude a conocer y segmentar a los diferentes colaboradores, que promueva el trabajo en red para compartir recursos escasos y, finalmente, que proyecte una correcta y convincente imagen de la organización. En este sentido, es importante subrayar que hoy en día estar presente y de forma activa en Internet, al cual es asequible acceder si se poseen los conocimientos básicos, es clave para que la ONL se relacione con sus distintos stakeholders, mejorando por tanto en eficiencia y posicionándose para atraer nuevos recursos a su causa.