El pasado día 20 de julio, Global Reporting Initiative (GRI) y CECA organizaron un taller con el objetivo de recabar feedback sobre el Borrador de G4. Más de 30 empresas participaron en esa jornada orientada a dar opinión y contribuir en la elaboración de Guías – G4 para memorias de sostenibilidad.
Los objetivos que se persiguen en la elaboración de esta nueva Guía son:
Ser fácil de usar
Mejorar la calidad técnica
Alinearse con otros marcos de elaboración de memorias
Ofrecer directrices que logren elaborar memorias centradas en la materialidad
Ofrecer directrices sobre como relacionar la memoria de sostenibilidad con la integrada
El borrador presenta una revisión profunda del contenido GRI 3.1 en cinco aspectos:
Gobierno & remuneración: G4 propone una serie de cambios para informar sobre el gobierno corporativo y la remuneración. Incorpora nuevos contenidos enfocados a distintos aspectos relacionados con la sostenibilidad. Los cambios propuestos incluyen nuevas revelaciones en la sección Perfil del informe sobre la relación de compensación de los ejecutivos, la proporción de remuneración de los ejecutivos de menor remuneración y la proporción de aumento de remuneración de los ejecutivos.
Enfoque de gestión: La información aportada sobre el enfoque de gestión tiene por objeto proporcionar a las organizaciones la oportunidad de explicar cómo están manejando la información de carácter material económico, ambiental y los impactos sociales. El proyecto de norma G4 esboza un enfoque genérico para todos los temas y propone que la información sobre el enfoque de gestión debe ser siempre un aspecto para reflejar las prácticas de gestión.
Cadena de suministro: Los aspectos modificados incluyen una nueva definición de cadena de suministro y de los proveedores, así como nuevas revelaciones sobre la cadena de suministro, incluida la práctica de contratación, selección y evaluación… se contemplan nuevos aspectos económicos y nuevos indicadores.
Cobertura: En este punto de plantea un cambio muy importante al plantear un nivel de cobertura basado en el impacto de la actividad y no en la titularidad jurídica o el nivel de control como se planteaba en la GRI 3.1.
Niveles de aplicación: Los niveles de aplicación se introdujeron con el lanzamiento de la Guía G3 para ayudar a las organizaciones a comunicar el grado de transparencia de sus informes de sostenibilidad en base a las directrices. Este sistema ha servido a las organizaciones a iniciar el viaje, en la mayoría de los casos de forma voluntaria, en los informes de sostenibilidad. En los últimos años, sin embargo, las preocupaciones han sido expresadas por las diferentes partes interesadas de que los niveles son mal entendidos por algunos usuarios al ser una opinión sobre la calidad del correspondiente informe. Para resolver estar preocupaciones y para alinearse a otras normas internacionales de información, se propone reemplazar los actuales niveles de aplicación el G3 y G3.1, por el G4. El G4 está destinado a aplicarse a todas las organizaciones independientemente de su tamaño o experiencia en la presentación de informes. Se contemplan 2 años de transición para la adaptación al G4.
Los asistentes al taller se organizaron por grupos de trabajo que centraron su labor en alguno de los cinco aspectos revisados trasladando las siguientes conclusiones:
De forma generalizada se percibe la nueva guía como extremadamente compleja y en algunos aspectos excesivamente exhaustiva en los datos a reportar. Se considera que esta complejidad puede representar un freno importante para que pequeñas y medianas empresas se decidan a utilizarla y consecuentemente decidan “desistir antes de empezar este viaje”. También es preocupante el grado de exhaustividad en los datos a reportar puesto que en algunos casos puede incluso llegar a suponer un problema de confidencialidad sobre asuntos considerados estratégicos por las empresas.
Otro aspecto preocupante es el nuevo concepto de “cobertura del informe” centrado en reportar sobre las actuaciones de una empresa ahí donde haya impacto, independientemente del control que pueda ejercer la empresa y sus posibilidades de obtener información y/o seguimiento. En este sentido las aportaciones coinciden en la dificultad de su aplicación y la ambigüedad que puede representar la identificación de elementos de riesgo sobre los que la nueva Guía pretende responsabilizar a las organizaciones sin que tengan los medios/recursos para ello.
A todo eso hay que añadir que el calendario planteado por GRI es que la nueva Guía se encuentre ya publicada en el mes de mayo del 2013 para que las empresas que lo deseen puedan utilizarla. En este sentido hay que señalar que a esa fecha no estarán disponibles las guías sectoriales y que con toda probabilidad no será posible la vinculación de la memoria de sostenibilidad con la preparación del informe integrado que viene desarrollando el Consejo Internacional de Información Integrado (IIRC).
Con estas aportaciones parece evidente que la nueva Guía no cumple con las expectativas de las organizaciones asientes a la jornada y tampoco cumple con los objetivos inicialmente propuestos. Personalmente me pregunto si no habría que retrasar su lanzamiento revisando su contenido para que realmente se adapte a los objetivos iníciales y alineando su calendario al del IIRC.