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Así lo afirma el informe “El Comercio Justo en España 2021”, el cual muestra que la facturación obtenida por los productos de Comercio Justo en nuestro país superó los 144 millones de euros. La AECID continuará apoyando acciones dirigidas a una mayor concienciación sobre el consumo responsable, clave para la construcción de una sociedad más justa y equitativa.

La concienciación acerca de que un cambio de paradigma respecto de nuestro modo de consumir es cada vez mayor en España. La crisis medioambiental está íntimamente relacionada al consumo y la producción y la ciudadanía sabe que puede cambiar el curso de la historia. El Comercio Justo es una gran alternativa que, afortunadamente, está ganando popularidad en nuestro país. Así lo muestra el informe “El Comercio Justo en España 2021”, realizado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ) con apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

La publicación afirma que la facturación obtenida por los productos de Comercio Justo el pasado ejercicio alcanzó los 144,1 millones de euros, lo que supone un incremento leve (0,27%) respecto al año anterior. Además, advierte que las tiendas de Comercio Justo recuperan la caída sufrida en 2020 aunque no llegan al nivel previo a la pandemia. Estas son las principales conclusiones del informe “El Comercio Justo en España 2021”. 

En palabras de Alberto Abad, presidente de la CECJ: “La crisis generada por la pandemia y la incertidumbre han ralentizado la apertura de nuevos espacios de consumo. Aún así, es importante destacar que, pese al freno en el ritmo de crecimiento, las ventas se mantienen, lo que supone una muestra de la fidelidad que genera el Comercio Justo tanto para los consumidores como para las empresas” 

Por su parte, Miriam Ciscar, jefa del Departamento de Cooperación Sectorial de la AECID, ha puesto el foco sobre los valores y principios del Comercio Justo. “La AECID quiere continuar contribuyendo a incrementar y afianzar el conocimiento sobre Comercio Justo que tiene la ciudadanía española, y formar y concienciar especialmente a los consumidores/as y al sector empresarial en los principios del comercio justo y consumo responsable, principios claves para la construcción de una sociedad más justa y equitativa comprometida en la lucha contra la pobreza y el desarrollo humano y sostenible”, ha señalado.

Con esta cifra global, el consumo medio por habitante en Comercio Justo durante 2021 en nuestro país fue de 3,04 euros, una cantidad muy similar a la del 2020 y que sigue alejada de las cifras de ventas registradas en otros países europeos. El informe explica que el 79’4% de las ventas de Comercio Justo se registraron en supermercados y grandes superficies, establecimientos que mantienen su liderazgo a pesar de haber perdido 4 puntos porcentuales respecto al año anterior. Por su parte, tras la importante bajada sufrida en 2020 por el sector Hostelería, Restauración y Catering (HORECA) a raíz del cierre de establecimientos, en 2021 este sector recupera protagonismo con una cuota de mercado que supera el 13%. Un dato esperanzador es que las 73 tiendas de Comercio Justo superan la caída sufrida en 2020, aunque su nivel de ventas no alcanza el de antes de la pandemia. El consumo de Comercio Justo en otros establecimientos minoristas (herbolarios, tiendas de productos ecológicos, et.) se ha mantenido en niveles similares al 2020.

La investigación indaga sobre cómo fue le consumo por productos, al respecto muestra que cerca del 97% de las ventas de Comercio Justo son de productos de alimentación. Y dentro de este bloque, el cacao y los dulces se consolidan como los productos estrella, generando más del 75% de la facturación. Le sigue el café, producto emblemático del Comercio Justo, que genera el 15% de las ventas. El consumo de té y otras infusiones, así como del resto de productos de alimentación (arroz, cereales, pasta, bebidas, etc.), aumenta ligeramente. En cuanto a productos que no son alimentación, lo más vendido es el textil. Aunque su peso en el global del sector sigue siendo minoritario, su facturación se ha incrementado en casi 1 millón de euros, lo que representa un crecimiento de un 43% en el último año. Este aumento ha venido derivado especialmente de los artículos de merchandising personalizables de algodón. En lo relativo a las garantías que avalan el cumplimiento de los principios del Comercio Justo, el 95,3% de las ventas procedió de productos con la certificación Fairtrade. El resto son artículos con otras certificaciones.

Finalmente, cabe destacar que, además de la comercialización, las organizaciones de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo realizaron durante 2021 más de 600 iniciativas concretas de concienciación en las que participaron más de 40.000 personas. Se trata de una cifra inferior a la de años anteriores a la pandemia. “En 2021 las restricciones y las necesarias medidas de prevención frente a la COVID-19 lógicamente influyeron en este descenso” ha explicado Mónica Gómez, vicepresidenta de CECJ. Por otro lado, la pandemia ha acelerado la realización de iniciativas de movilización social de manera virtual y a través de redes sociales. “Esta línea de trabajo se ha consolidado en el 2021 y lo valoramos como una oportunidad para llegar a nuevos públicos”. El área de trabajo que ha recuperado su nivel anterior ha sido el de la sensibilización en centros educativos. En 2021, más de 39.000 estudiantes y 910 docentes participaron en acciones formativas relacionadas con el Comercio Justo y el consumo responsable, realizadas en 312 centros educativos desde Primaria hasta Educación Superior.

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