Publicado el
Un nuevo informe de la Asociación Mundial para la Reducción de la Quema de Gas (GGFR, por sus siglas en inglés) del Banco Mundial, ha encendido las señales de alarma: los avances mundiales relacionados con la reducción de la quema de gas (una práctica antieconómica de la industria, que consiste en quemar gas natural durante la producción de petróleo) se han estancado en la última década. Se trata de aquellos procedimientos que liberan contaminantes en la atmósfera, y se calcula que por medio de estos se han liberado 361 millones de toneladas de dióxido de carbono, 39 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono equivalente en forma de metano, y carbono negro (hollín), lo que contribuye significativamente al calentamiento global.
Una década perdida en materia de reducción de quema de gas

Detener el cambio climático implica desplegar acciones en diversos sentidos. El desafío es tal, que es preciso apuntar en diferentes direcciones ya que el panorama mundial es poco alentador. Según un nuevo informe de la Asociación Mundial para la Reducción de la Quema de Gas (GGFR, por sus siglas en inglés) del Banco Mundial, la quema de gas en todo el mundo generó casi 400 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono equivalente en 2021, lo que puso aún más de relieve la urgente necesidad de acelerar la descarbonización de las economías mundiales.

La GGFR del Banco Mundial es un fondo fiduciario y una asociación de Gobiernos, empresas petroleras y organizaciones multilaterales que trabajan para poner fin a la quema regular de gas en los emplazamientos de producción de petróleo de todo el mundo. Ayuda a identificar soluciones para los diversos obstáculos técnicos, económicos y regulatorios que se presentan para la reducción de la quema.

Es evidente, según los expertos, que los avances mundiales relacionados con la reducción de la quema de gas (una práctica antieconómica de la industria, que consiste en quemar gas natural durante la producción de petróleo) se han estancado en la última década. Los datos satelitales compilados y analizados para el 2022 Global Gas Flaring Tracker Report muestran que el año pasado se quemaron 144.000 millones de metros cúbicos (MMC) de gas en instalaciones de prospección y extracción de petróleo y gas. Diez países productores de petróleo que queman gas representaron el 75 % de todas las quemas de gas; siete de ellos (Rusia, Iraq, Irán, Estados Unidos, Venezuela, Argelia y Nigeria) han ocupado los primeros siete lugares de manera constante en los últimos 10 años. Si bien el desafío es grande, el mensaje es claro: poner fin a la quema y a las emisiones de metano es fundamental para la transición energética.

El documento explica que la quema de gas es consecuencia de restricciones económicas y del mercado, y de la falta de una reglamentación adecuada y de voluntad política. Es una práctica que libera contaminantes en la atmósfera, y se calcula que por medio de ella se han liberado 361 millones de toneladas de dióxido de carbono, 39 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono equivalente en forma de metano, y carbono negro (hollín), lo que contribuye significativamente al calentamiento global.

Demetrios Papathanasiou, director global de la Práctica Global de Energía e Industrias Extractivas del Banco Mundial manifestó que: “El cambio climático es uno de los desafíos de desarrollo decisivos de nuestra época. Para mitigar el cambio climático, es fundamental poner fin a la contaminación y a la práctica antieconómica de quemar gas, así como descarbonizar la producción de petróleo y gas, acelerando al mismo tiempo la transición hacia una energía más limpia”.

Un importante dato que se desprende del documento es el retroceso que supuso la irrupción del coronavirus. Sin embargo, hay una luz de esperanza. Los investigadores analizan que, si bien en 2021 los avances en medio de la pandemia mundial fueron decepcionantes, en varios países surgieron algunas tendencias alentadoras en cuanto a la reducción de la quema de gas. Según la GGFR, Estados Unidos es el único de los 10 principales países que queman gas que, en la última década, ha logrado reducir los volúmenes de quema y aumentar al mismo tiempo la producción, y que ha disminuido su intensidad de quema (el volumen de gas quemado por barril de petróleo producido) en un 46 %. En un informe complementario, Global Flaring and Venting Regulations (Regulaciones sobre quema y venteo en el mundo), la GGFR examina las políticas sobre quema y venteo de 21 países y destaca las estrategias para reducir emisiones que han tenido buenos resultados. En el informe se concluye que muchos países también han demostrado liderazgo en materia de reducción de quema.

La investigación detalla la situación de algunos países en relación al tema y destaca que Kazajstán ha conseguido la mayor reducción de quema general de todos los países en los últimos 10 años, con una reducción de la quema absoluta de 4 MMC en 2012 a 1,5 MMC en 2021, gracias a una estricta aplicación de las regulaciones y a un mercado de gas local que incentiva la recuperación del gas relacionado. Por su parte, Colombia redujo la quema de 1 MMC en 2012 a 0,3 MMC en 2021, gracias al uso de gas nacional y a firmes regulaciones que prohíben desperdiciar el gas.

Finalmente, Zubin Bamji, gerente de programa de la GGFR sostuvo que: “Muchos países productores de petróleo ya aplican políticas para reducir la quema y venteo de gas, pero no todas las estrategias han demostrado ser efectivas. Nuestro nuevo examen y análisis regulatorio ayudará a los Gobiernos a elaborar las políticas pertinentes que sean adecuadas a sus circunstancias específicas de modo que para 2030 se pueda poner fin a la quema, que es nuestra meta colectiva”.

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies