El año que pasó ha sido uno de los más duros en la historia reciente. La pandemia trajo graves consecuencias en el ámbito sanitario y económico, consciente de esto, desde el primer momento BBVA dio un paso al frente ayudando a los colectivos más vulnerables. Además de las medidas de seguridad, continuidad del negocio y apoyo financiero al sector empresarial y de particulares, la entidad ha reforzado su compromiso para ayudar a la sociedad en su lucha contra la pandemia. Así, el plan ‘Respuesta Social al COVID-19’ ha beneficiado de forma directa a 3,5 millones de personas en 10 países en los que opera el banco.
Dicho plan fue realmente ambicioso y comprometido. La entidad financiera destinó 35,7 millones de euros del plan ‘Respuesta Social al COVID-19’ a tres líneas de actuación:
Estas líneas están vinculadas a su vez a tres ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) concretos. La aportación de BBVA se ha canalizado a través de los bancos locales en Argentina, Colombia, España, Estados Unidos, México, Paraguay, Perú, Portugal, Turquía y Uruguay, así como de la Fundación BBVA. Para garantizar la distribución eficaz de los fondos, se ha diseñado un plan de respuesta global sin precedentes, que incluye la coordinación con gobiernos, autoridades sanitarias y otras empresas y organizaciones sociales.
La primera línea de ayudas apunto a una de las necesidades más urgentes que surgió tras la llegada del coronavirus, que fue el material sanitario. En la mayoría de los países estos fueron elementos de primera necesidad que durante los primeros meses de la pandemia eran muy difíciles de conseguir. Esta línea de actuación, vinculada con el ODS 3 (Salud y Bienestar) y que representa el 81% de la contribución, se ha dedicado a la compra de material sanitario que incluye 2.845 respiradores, 400 oxigenadores, 2.020 test, 9,5 millones de mascarillas, 5.396 EPI o kits de protección, 144.057 gafas y protectores faciales, 8,3 millones de guantes, 26.850 unidades de gel y alcohol, 21.004 mantas y 3,7 millones de unidades de otro material médico. Con este material se ha apoyado a 371 hospitales.
La segunda línea apuntó a ayudar a los colectivos vulnerables. En este sentido, la entidad financiera apuntó a trabajar el ODS 2 (Hambre Cero) y ODS 10 (Reducción de las Desigualdades) y representó un 11% de la donación. Así, la banca se ha enfocado a ayudar a colectivos vulnerables a través de la colaboración con 472 entidades. Entre ellas destacan, a nivel global, Cruz Roja en Argentina, España, México y Colombia, y Bancos de Alimentos en Estados Unidos y Portugal. Los fondos han servido fundamentalmente para cubrir sus necesidades alimentarias y bienes de primera necesidad; apoyo afectivo y psicosocial, y asistencia y formación.
Finalmente, pero no menos importante, la investigación ha sido la úlitma línea del plan de acción que puso en marcha con celeridad BBVA. Esta tercera línea de los fondos, vinculada con el ODS 9 (Industria, innovación e Infraestructura) y que representa un 8% de la donación total, se ha destinado al fomento de la investigación contra el COVID-19, que ha beneficiado directamente a 226 científicos o investigadores.
Adicionalmente a la contribución directa de BBVA, sus empleados y clientes han donado más de 11,2 millones de euros, que se han destinado a las tres líneas de acción descritas anteriormente. En concreto, el banco puso en marcha una iniciativa entre sus empleados, para que pudieran unirse a la ayuda solidaria contra la pandemia, que ha recaudado 1,8 millones de euros que fueron distribuidos a diferentes entidades colaboradoras globales y locales. Asimismo, BBVA ha promovido la participación de sus clientes con varias campañas, a través de las cuales se han recaudado 9,4 millones de euros.
Asimismo, BBVA ha activado iniciativas de ayuda a sus clientes, con foco en empresas, pymes y autónomos, pero también para los particulares más afectados por la crisis provocada por el COVID-19. Finalmente, la entidad también ha apoyado a sus proveedores más cercanos con esquemas de protección para empleados y empresas, y con el adelanto del pago de facturas, sin esperar al plazo acordado.