La crisis económica que la pandemia está dejando a su paso parece no tener un final. Los presupuestos nacionales e internacionales están al límite para cumplir con todas las necesidades que emergen. Naciones Unidas estima que en la presente década se necesitará destinar 6 billones de dólares cada año para poder cumplir la Agenda 2030, por lo que la movilización de recursos públicos y privados a gran escala va a resultar fundamental.
La publicación ‘Finanzas Sostenibles y Agenda 2030: Invertir en la transformación del mundo’ de la Red Española de Pacto Mundial apunta la necesidad de promover la inversión responsable para captar nuevos recursos e involucrar al sistema financiero en la consecución de los ODS, además de impulsar productos financieros innovadores (como los bonos sostenibles, los bonos verdes o los bonos sociales), que pueden servir a las empresas para obtener rentabilidad e impactar de forma positiva sobre alguno o varios de los ODS.
Durante la inauguración de la jornada virtual “Las finanzas sostenibles en el marco de la Agenda 2030”, organizada por la Red Española de Pacto Mundial y Spainsif. Clara Arpa, presidenta de la Red Española de Pacto Mundial, expresó que “se necesitaría dedicar entre 2 y 4 billones de dólares más al año de los que actualmente se están destinando para llegar a la cifra recomendada por la ONU y dotar a los ODS de la financiación suficiente. Esto implica que hay que aumentar la inversión y hacer que el sistema financiero sostenible a nivel global tenga la capacidad de resolver y evitar futuras crisis como la provocada por la COVID-19”.
La jornada ha contado con dos ponencias de expertas en inversión sostenible. Margarita Pirovska, Head of Fiduciary Duty in the 21st Century, United Nations – Principles for Responsible Investment, ha asegurado que “es necesario que los inversores se sumen a los reguladores y apoyen las reformas políticas que alinean los mercados de capitales con una recuperación sostenible, inclusiva y baja en carbono”.
Mientras que Marie Morice, Head of Sustainable Finance, UN Global Compact, ha presentado los nuevos Principios CFO sobre sobre inversiones y finanzas para los ODS, que pretenden aumentar la ambición sobre los objetivos de sostenibilidad y favorecer que con sus inversiones las empresas aceleren su impacto positivo sobre el desarrollo sostenible. Joaquín Garralda, presidente de Spainsif, ha destacado el papel que juega la legislación para impulsar la inversión sostenible, como en el caso de la UE y su Taxonomía de las Finanzas Sostenibles, que “por un lado ayudará a distinguir entre aquellas inversiones que respondan con fundamento a criterios ambientales, sociales y de gobernanza de las que solo lo declaran sin una sólida justificación, y, por otro, clarificará las vías de transición hacia una economía descarbonizada”.
Además participaron del encuentro virtual expertos en finanzas sostenibles. En la primera mesa, Ángel Martínez-Aldama, presidente de Inverco; María Peña, consejera delegada de ICEX, Rodrigo Madrazo, director general de Cofides; Sandra González, directora de Banca Responsable de Finanzas de CaixaBank, y Luca Passa, director general de Administración, Finanzas y Control de Endesa, han analizado las claves para que la Agenda 2030 sea aceleradora de las finanzas sostenibles. Asimismo, han coincidido en destacar la creciente movilización de las empresas para cumplir con los ODS, a través de la financiación y los proyectos, y han remarcado el papel que tienen que jugar los gobiernos para su dinamización.
En el segundo panel participaron, Beatriz Barros de Lis, directora general para España y Portugal en AXA Investment Managers; María José Gálvez, directora de Sostenibilidad de Bankia; Antonio Cordero, director general de Financiación y Estrategia del Instituto de Crédito Oficial (ICO), y Sophie del Campo, directora general para Iberia, Latinoamérica y US Offshore de Natixis Investment Managers, han examinado de qué manera los nuevos marcos regulatorios están impulsando las decisiones de inversión según criterios ASG, y están marcando un récord histórico en inversiones sostenibles, a pesar del COVID-19.