Publicado el
Ha costado mucho tiempo, pero España ya puede decir que, por lo menos, lo tiene aprobado. Se trata de un Plan con la finalidad de la aplicación en el ámbito nacional de los Principios Rectores de Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos humanos

El Consejo de Ministros ha aprobado recientemente, a propuesta del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, el Plan de Acción Nacional de Empresas y Derechos Humanos. Según informan dichas fuentes oficiales, el Plan plasma el compromiso de España de proteger los derechos humanos, también frente a cualquier impacto que la actividad empresarial pudiera tener sobre ellos y responde igualmente al llamamiento del Congreso y del Senado de avanzar en materia de empresas y derechos humanos en forma de proposiciones no de ley y de mociones.

Un documento que responde a las recomendaciones efectuadas en el marco de la Unión Europa a través de la Estrategia renovada de la Unión Europea para 2011-2014 sobre la Responsabilidad Social de las Empresas (RSE/RSC) y del Plan de Acción de la Unión Europea sobre Derechos Humanos (DDHH) y democracia 2015-2019.

El Plan tiene presente la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aprobados por la Asamblea General de las Naciones Unidas, que invita a las empresas a alinear su estrategia corporativa de negocio con los objetivos de desarrollo para buscar el valor añadido que pueden aportar en los países en desarrollo.

"Este Plan contribuye a fortalecer la ventaja competitiva de las empresas españolas en el mercado global y ofrece a las empresas el marco óptimo para desarrollar sus operaciones empresariales, previniendo y mitigando riesgos basados en los derechos humanos y fortaleciendo sus capacidades al respecto", indica el ministerio de Alfonso Dastis.

El texto aprobado por el Consejo de Ministros es el resultado de un proceso que se inició en 2013 y se desarrolló mediante la celebración de consultas amplias entre Administración, empresas y sociedad civil en una primera fase que se extendió durante casi dos años, y que fue seguida de un intenso trabajo de coordinación interministerial durante los últimos meses. El Plan crea una Comisión de Seguimiento que evaluará anualmente la ejecución de las medidas previstas y elaborará propuestas de actualización del mismo. De este modo, la Comisión de Seguimiento irá concretando la puesta en práctica de las medidas de ejecución, identificando a los responsables de su aplicación, los indicadores de cumplimiento y el calendario de ejecución.

Imagen de archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies