Según un estudio presentado en ESADE, las grandes corporaciones son más competitivas, pero poco emprendedoras y sus trabajadores están menos satisfechos. En la pequeña empresa familiar es todo lo contrario: pese a ser la más cercana al empleado y la que más fomenta el espíritu emprendedor, le cuesta responder a los retos de la globalización.
Según un estudio presentado en ESADE, las grandes corporaciones son más competitivas, pero poco emprendedoras y sus trabajadores están menos satisfechos. En la pequeña empresa familiar es todo lo contrario: pese a ser la más cercana al empleado y la que más fomenta el espíritu emprendedor, le cuesta responder a los retos de la globalización.
El estudio asegura que el modelo de empresa que mejor responde a cuatro criterios (satisfacción del trabajador, emprendeduría, cercanía, y competitividad frente a la globalización) es el de gran empresa familiar. Así lo considera este informe, basado en una encuesta realizada en Alemania entre emprendedores, periodistas y población general. El estudio lo ha realizado el profesor Arist von Schlippe, del Witten Institut for Family Business y profesor visitante de ESADE.
El estudio se ha presentado en el marco del Congreso internacional sobre la empresa familiar organizado por el European Institute for Advanced Studies in Management (EIASM) y es una de las citas académicas del año con más reputación entre los expertos mundiales.