Esta entrevista forma parte de la serie #ConversacionesdeImpacto en la que han participado Gonzalo Fanjul, Pablo Sánchez, Arancha Martínez, Gloria Gubianas, María Guerrero y Amaia Rodríguez.
Pablo Martín Sánchez: ¿Quién es Natalia Valle?
Natalia Valle: ¿A nivel personal o profesional? Bueno, los dos van de la mano. Soy una persona que estudié Economía y Negocios en la Universidad de Alcalá (2012-2016) y después un máster en Filosofía y Ciencias Sociales en la London School of Economics, lo que me permitió repensar los modelos económicos y de mercado que aprendí en la carrera y con los que no siempre estaba de acuerdo. También me abrió mucho al campo de la economía de impacto.
PMS: ¿En qué sentido?
NV: Por ejemplo, a la hora de ver cómo la economía de impacto puede ayudar a medir el desarrollo de los países. Primero habría que definir qué es el crecimiento y qué queremos medir. ¿Queremos medir solo cuánto dinero se gana o también si ese dinero está distribuido equitativamente? También es importante considerar si ese dinero está generando negocios que sean ecológicos, justos, local, y sostenibles. En resumen, soy economista, filósofa y amante de la naturaleza y del medio ambiente.
PMS: ¿Cómo nace Plant on Demand en 2019? ¿Dónde os conocisteis y de qué manera cómo surgió la idea para lanzarlo en clave tecnológica?
NV: Nos conocimos en Finlandia donde los siete fundadores de Plant on Demand estábamos haciendo un Erasmus. Todos teníamos un perfil tecnológico y un interés en la producción agroecológica, el producto local y la sostenibilidad. Además, compartíamos una mirada sobre cómo el sector de la alimentación y de cómo comemos se traslada y tiene impacto en el medio, no solo en la biodiversidad, el cuidado de los suelos o la gestión del agua, sino en las comunidades locales, las técnicas de producción o la cultura. La clave está en cuidar el suelo y si lo cuidas la producción viene sola y será más natural y no se necesitarán fertilizante químicos o insecticidas.
Varios de los fundadores se fueron a trabajar a empresas tecnológicas en Silicon Valley. Yo estudié el master, otros trabajaron en una importadora y exportadora de frutas y verduras en Holanda y otros en cooperativas agroecológicas. Entonces, Alejandro Wonenburguer, uno de los fundadores, recibió una herencia y decidió invertirla en una empresa que ayudara a solucionar estos retos. Empezamos como una consultoría tecnológica y, al trabajar con productores y cooperativas, vimos una necesidad común no resuelta a nivel tecnológico. Solo un dato, desde 2009 han desaparecido 75.000 productores en España y los que continúan tienen que hacer frente a una rentabilidad muy baja, es muy difícil para los pequeños productores acceder al mercado o conseguir economía de escala por ellos mismos. La situación es muy compleja, de ahí vino la intención de ayudar a superar este desafío.
PMS: ¿Cuál es vuestro propósito? y ¿qué papel tiene la tecnología para conseguirlo
NV: Queremos empoderar a los agricultores y ganaderos para que tengan una vida digna en el entorno rural. Además, buscamos acelerar la transición hacia modelos de producción y consumo más ecológicos y locales. Esto mejora la rentabilidad y sostenibilidad económica de los productores, impacta positivamente en el medio ambiente y promueve una alimentación más saludable, que está en la base de muchas enfermedades crónicas por el nivel de procesamiento de los alimentos.
En POD contamos con una herramienta tecnológica para ayudar a las pequeñas empresas productoras de alimentos en la gestión comercial de su negocio (gestión de pedidos, ecommerce, trazabilidad, facturas o cobros). Por otra parte, según hemos ido trabajando con el ecosistema agroalimentario: fundaciones, ONG o asociaciones de productores nos dimos cuenta de que había nuevos modelos organizativos que nos permiten agrupar la producción de los productores locales en centros regionales de forma que esos pequeños productores puedan comercializar de manera conjunta a clientes más grandes que de manera individual no podrían como la restauración colectiva en colegios, hospitales o centros y residencias de mayores. Gracias a la agrupación los productores individuales pueden acercarse a ese tipo de colectividades. Ahí lo que hacemos es dar la tecnología a los centros de acopio para que puedan ser una realidad o escalar. Además, colaboramos muy de cerca con las entidades del Tercer Sector que apoyen a la agroecología y el consumo local para que sean ellas las que articulen este tipo de agrupaciones.
PMS: Como indicabas, han desaparecido 75.000 productores locales desde 2009, que ha venido aparejado con un proceso de despoblación rural. ¿Por qué las ciudades no pueden dar la espalda a los pueblos y al sector primario?
NV: Otro dato. Desde principios del siglo XX se han perdido más del 90% de la biodiversidad de semillas a nivel global. Por eso, es importante poner el foco en los productores locales de los pueblos porque son los guardines de esas semillas y de la biodiversidad, que tiene efecto multiplicador en la biodiversidad local y en la resiliencia del sistema alimentarito. Si se planta una misma semilla para un producto en diferentes países, por ejemplo, para el maíz, estamos expuestos a un riesgo absoluto si hubiera algún problema con esa semilla, lo que nos haría vulnerables, a lo que se suma la pérdida cultural del patrimonio gastronómicos propia de cada región.
Por eso, la agricultura a pequeña escala es un dinamizador de las económicas rurales y ayudan a descentralizar la economía de las ciudades. Además, evita perder el patrimonio cultural de los pueblos, la forma de cultivar y permite fijar la población rural.
PMS: ¿Cómo es la primera aproximación a estos productores locales?
NV: En el primer contacto, reticencia porque es un sector que ha sido maltratado y va con mucha precaución, pero después comprueban que nuestro propósito está 100% alienado con su actividad y cuando ven que detrás de POD hay gente comprometida como ellos se produce una apertura total y una relación hasta familiar. A NESI forum acudieron dos productores.
PMS: ¿De qué manera las administraciones públicas pueden impulsar los productos de cercanía y sostenibles para apoyar a los productores agroecológicos?
NV: En primer lugar, impulsando licitaciones de compra publica que incluyan parámetros exigentes en la adquisición de alimentos ecológicos, locales y frescos. Eso ayuda a articular toda la oferta y a los productos de la región para poder dar servicio a lo que se les pide. Además de desarrollar programas que impulsen la alimentación agroecológica, local y sostenible porque las AAPP tienen el poder de la restauración colectiva para crear centros de acopio y distribución regional como los Ecocomedores Escolares del Gobierno de Canarias, que involucra a 100 escuelas, el Gobierno de Navarra, que en sus licitaciones de compra pública exigen productos locales, frescos y de calidad, o Horta Cuina en Valencia.
PMS: ¿Cómo os habéis financiado hasta ahora?
NV: Hemos contado con dos rondas. Una pre-seed en 2021 de 100.000 euros con inversores de impacto social, la colaboración de ENISA, aportaciones de los socios y donaciones filantrópicas. Y otra en 2022 con Bolsa Social, una ronda de financiación participativa de 500.000 euros
PMS: ¿Qué habéis aprendido de la búsqueda de financiación?
NV: Pues que en España aún no estamos a la altura de Europa en inversión de impacto social. Faltan formas jurídicas que contemplen la figura de la startup social. Necesitamos un híbrido o que los inversores adopten tesis de inversión realmente ancladas en el cambio sistémico.
PMS: ¿Cómo te gustaría ver a Plan on Demand dentro de 10 años?
NV: Me gustaría que POD haya sido capaz de acercar el producto agroecológico a un millón de personas, ayudando a articular la producción agroecológica en redes locales y facilitando la distribución local y la demanda.
PMS: ¿Qué recomendarías a alguien que quiere emprender con impacto?
NV: Primero, que hable con mucha gente, que vea lo que se está haciendo y busque ese eslabón perdido que falta para hacer que el ecosistema funcione mejor. Y que ahorre o busque inversores.
PMS: ¿A quién admiras?
NV: A los productores con los que trabajo. Tienen una conexión especial con su tierra y una capacidad de resiliencia impresionante.
PMS: ¿Qué es para ti la felicidad?
NV: Estar en coherencia con la vida y mis acciones.
PMS: ¿Qué te gustaría hacer este año que no has hecho?
NV: Cogerme unas vacaciones. (Responde con ilusión y una sonrisa).
PMS: Un libro…
NV: "El fin es mi principio" de Tiziano Terzani porque es humano y real.
PMS: Una película…
NV: "The Biggest Little Farm", un documental sobre agroecología muy recomendable.