La conocida afirmación “el mejor momento para plantar un árbol fue hace 20 años y el segundo mejor momento es ahora” debería ser la frase de inicio de la COP27. Tendríamos que haber hecho más hace tiempo, sí, pero no es el momento de mirar atrás sino hacia delante.
Hay que actuar y hay que hacerlo ya. Sin demorarlo más. Y no lo digo yo, lo dice el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) “La evidencia científica es inequívoca: el cambio climático constituye una amenaza para el bienestar de la humanidad y la salud del planeta. Si se sigue retrasando la puesta en marcha de una acción concertada a nivel mundial, se agotará el plazo breve y en rápida disminución del que disponemos para asegurar un futuro digno[1]”
Necesitamos que esta COP27 sea un punto de inflexión en el posicionamiento global frente al cambio climático. Los mandatarios de los casi 200 países que se reúnen estos próximos días en Egipto deberían salir de la cumbre del clima con planes de acción concretos y compromisos firmes para alcanzar el objetivo de mantener el incremento de temperatura media global por debajo de los 1,5º; y también con planes de adaptación y mitigación de los efectos del inevitable ya cambio climático que estamos sufriendo todos.
2022 podría ser con toda probabilidad el año en el que más récords relacionados con el cambio climático se han roto. España tuvo la ola de calor más larga de su historia; Europa y Estados Unidos vivieron su verano más caluroso; Australia ha tenido el año más lluvioso desde que tiene registros; y así podríamos seguir hablando de incendios, sequías, inundaciones y fenómenos climáticos extremos que superan los registrados hasta ahora por todo el planeta. ¿Qué más necesitamos para saber que es necesario actuar ya y hacerlo de forma común?
Vivimos actualmente una crisis económica, energética y geopolítica que inevitablemente está marcando la agenda mundial y sin embargo será necesario encontrar consenso para favorecer el bien común. ¿Serán capaces los grandes emisores de Gases de Efecto Invernadero (Estados Unidos, la Unión Europea y China) de mirar más allá y cerrar compromisos firmes en torno al cambio climático? El contexto actual ha puesto de manifiesto la necesidad de una Europa ejemplar que apueste por las energías renovables y garantice su independencia energética; Estados Unidos debe dar un paso de gigante para compensar la falta de acción de la administración anterior y China tiene muchos intereses en África que podrían hacerle buscar medidas de consenso.
Mejor ser optimistas. Esperamos que los líderes de hoy actúen con responsabilidad global. Que vean más allá de sus fronteras, de sus ideologías y analicen las consecuencias que sus acuerdos (o la falta de ellos) puede tener para todos. Es necesario actuar y el momento de hacerlo es ahora.
[1] https://www.ipcc.ch/site/assets/uploads/2022/02/PR_WGII_AR6_spanish.pdf