Publicado el
Un análisis elaborado por Crédit Mutuel AM examina la evolución del mercado de bonos verdes en 2024 y las perspectivas para 2025, destacando las tendencias clave y los desafíos que enfrenta la financiación sostenible a nivel global.
El crecimiento de la deuda sostenible marca un nuevo hito en 2024

El año 2024 se consolidó como un periodo de fuerte emisión de deuda sostenible en el ámbito corporativo, alcanzando un total de 370.000 millones de dólares en bonos emitidos. Sgeún un interasante análisis de Crédit Mutel AM que analiza la evolución del mercado de bonos verdes en 2024 y sus perspectivas para 2025,  los datos muestran que esta cifra supera los 360.000 millones registrados en 2022, aunque aún se mantiene por debajo del récord de 2021, cuando se emitieron 460.000 millones. Así lo señala la fuente consultada, que resalta la tendencia al alza en el financiamiento sostenible, a pesar de algunas fluctuaciones en el mercado.

Uno de los aspectos clave de este crecimiento ha sido el aumento de la emisión de bonos por parte de corporaciones no financieras y organismos supranacionales, compensando la reducción de emisiones por parte de los bancos. La mayoría de los fondos obtenidos a través de estos bonos han sido dirigidos a proyectos de energías renovables, infraestructura para transporte eléctrico y movilidad sostenible, consolidando estas tecnologías como el núcleo de la transición energética global.

Evolución del mercado y señales de advertencia

El análisis de Crédit Mutel AM advierte que ,durante la segunda mitad del año, los bonos verdes europeos con grado de inversión excluidos de los criterios PAB experimentaron un rendimiento más bajo. No obstante, la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA) ha aclarado recientemente su postura, indicando que las exclusiones no se aplicarán a los bonos que cumplan con la normativa europea de bonos verdes (EUGBS). Además, se ha destacado que la transparencia en el uso de los ingresos podría ser un factor clave en la evaluación de estos instrumentos financieros.

A pesar del crecimiento continuo, algunos desafíos persisten. En Europa, el mercado de deuda ESG está dominado principalmente por emisores recurrentes, lo que limita la incorporación de nuevos actores. En Estados Unidos, la incertidumbre política ha ralentizado la adopción de este tipo de financiamiento por parte de algunos emisores. Aunque continúan surgiendo nuevos formatos de instrumentos de deuda vinculados a criterios ESG, estos no parecen ser suficientes para impulsar un crecimiento acelerado en el corto plazo.

Perspectivas para 2025

Para el próximo año, se espera un crecimiento moderado del 10% en el mercado de deuda sostenible, lo que llevaría el volumen total a aproximadamente 900.000 millones de dólares entre emisiones corporativas y soberanas. Sin embargo, la proporción de deuda sostenible dentro del total de emisiones primarias se mantendría estable, con solo un leve incremento.

En cuanto a la implementación de la normativa EUGBS, se han generado expectativas más favorables para los emisores con carteras de alta intensidad de carbono. La normativa establece sinergias con otras regulaciones existentes, lo que podría facilitar su adopción. No obstante, la alineación con la taxonomía europea aún requiere ajustes, lo que podría ralentizar su implementación a lo largo de 2025.

De cara al futuro, expertos de Crédit Mutel AM sostienen que la financiación sostenible sigue consolidándose como un pilar clave en la transición energética. Aunque persisten desafíos regulatorios y de mercado, la creciente demanda por inversiones alineadas con criterios ESG sugiere que el segmento de deuda sostenible continuará desempeñando un papel estratégico en la economía global.

¡Comparte este contenido en redes!

Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies