El último Informe sobre los progresos realizados para lograr los ODS de Naciones Unidas no deja lugar a dudas: la mitad de las 140 metas establecidas están lejos de la trayectoria deseada. Renovar el compromiso internacional y encauzar las acciones y los mecanismos de financiación e inversión necesarios para revertir esta situación es crucial para caminar hacia un planeta más verde, inclusivo, seguro y justo para todos.
Desde el ámbito de las finanzas e inversiones sostenibles, los retos son cada vez más exigentes. El COVID-19 y la posterior crisis socioeconómica, las tensiones geopolíticas, la crisis energética, el aumento de precios y los tipos de interés han aumentado en más de un 70% la brecha de financiación necesaria para la consecución de los ODS en los países en desarrollo. La reciente Cumbre de los ODS celebrada en Nueva York ha urgido a asignar 500.000 millones de dólares anuales para el logro de los ODS, y a reformar la arquitectura financiera internacional para que permita implementar mecanismos de financiación que aseguren una transición justa, equitativa, e inclusiva en el ámbito energético, digital, alimenticio y económico, que asegure la educación, la seguridad y la protección social en los países más vulnerables. Ello no hace más que reforzar el compromiso de Spainsif y de todos sus miembros por el impulso de las finanzas e inversiones sostenibles.
El último informe de ODS de Naciones Unidas destaca que en 2022 las emisiones de CO2 de la combustión de energía y los procesos industriales crecieron un 0,9% a nivel mundial, alcanzando un máximo histórico de 36.800 millones de toneladas métricas, muy por debajo del crecimiento del PIB mundial, cifrado en el 3,2%. Es decir, se revierte una tendencia de más de una década de desvinculación entre emisiones y crecimiento económico. Este cambio de tendencia está vinculado a los avances tecnológicos en el ámbito de energías no contaminantes como las renovables, los vehículos eléctricos y las bombas de calor, pero también con la reducción de la producción industrial en China y Europa. A pesar de esta desaceleración, especialmente de la industria manufacturera, las industrias de tecnología media-alta no decrecieron y se mantuvieron sólidas. Estas industrias de tecnologías avanzadas son necesarias para el crecimiento sostenible y contribuyen en general a un crecimiento más ecológico.
Desde Spainsif, todos los años se realiza un análisis de situación y evolución de la inversión sostenible en España, de sus crecimientos y de las estrategias de inversión sostenible más utilizadas, así como de los ODS más perseguidos. Dar visibilidad a estos aspectos es también fundamental para poder cuantificar y tomar decisiones que favorezcan el avance de la inversión sostenible en nuestro país.