La Torre Moeve acogió el acto de entrega de los Premios al Valor Social, una cita consolidada del calendario solidario de la Fundación Moeve que reunió a representantes de las entidades ganadoras, profesionales de la compañía que actúan como madrinas y padrinos solidarios, miembros del jurado, el patronato y galardonados de ediciones anteriores. En total, se reconocieron quince proyectos que trabajan para mejorar las condiciones de vida de colectivos vulnerables a través de propuestas innovadoras que combinan inclusión social y transición ecológica justa. Cada organización podrá recibir hasta 25.000 euros, una aportación que forma parte del fondo global de 375.000 euros asignado por la Fundación en esta edición.
Durante la ceremonia, Bettina Karsch —vicepresidenta de la Fundación Moeve y vicepresidenta ejecutiva de Personas, Organización y Cultura— subrayó el papel de estos premios como impulso al Tercer Sector y recordó que la esencia del galardón se sostiene en “avanzar juntos hacia un futuro más inclusivo, humano y sostenible”. En su intervención, dirigió unas palabras a las entidades reconocidas, destacando que su labor demuestra que “cuando colaboramos y compartimos un propósito común, las cosas buenas ocurren”.
El acto contó también con la intervención de Ana Dávila, consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, quien aseguró que el trabajo premiado refleja fielmente los valores del modelo social madrileño. Recordó que el compromiso social “no se pacta, se ejerce”, y puso en valor el papel del Tercer Sector, que —con el impulso de iniciativas como las de la Fundación Moeve— es capaz de abrir oportunidades allí donde otras miradas solo detectan barreras.
La ceremonia estuvo conducida por la creadora de Nosoyloqueves, Anabel Domínguez, y contó con la actuación de la Fundación Psico Ballet Maite León, cuyos bailarines aportaron un momento artístico especialmente aplaudido.
Entre los proyectos con base en Madrid se encuentran iniciativas centradas en la formación ambiental y la empleabilidad juvenil, la inserción laboral en empleos verdes para personas en exclusión severa y un programa de acompañamiento para combatir la soledad no deseada en personas mayores mediante actividades cognitivas e intergeneracionales. En Huelva, se premiaron propuestas que combinan energía fotovoltaica con terapia para personas con discapacidad intelectual, la creación de un santuario verde destinado al autocuidado y el uso de tecnologías 3D para mejorar la autonomía de personas con enfermedades neurológicas. En el Campo de Gibraltar, las entidades seleccionadas desarrollan programas de inclusión laboral, atención integral a personas con alzhéimer y la creación de espacios educativos accesibles y sostenibles. En Canarias, los galardones recayeron en iniciativas orientadas al fortalecimiento del voluntariado, el impulso a la vida independiente de personas con discapacidad intelectual y la formación en energías renovables para jóvenes migrantes extutelados.
Desde 2005, y según los datos facilitados por la Fundación Moeve, la entidad ha recibido 5.883 propuestas y ha premiado 527 proyectos, destinando 5,6 millones de euros y logrando acompañar a más de 114.000 personas en situación de vulnerabilidad. Una trayectoria que, edición tras edición, confirma el papel de estos premios como motor de cambio social.
