El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha abierto hoy una nueva convocatoria de subvenciones dotada con 700 millones de euros para el despliegue de sistemas de almacenamiento energético a gran escala. La medida, cofinanciada a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) 2021-2027 y gestionada por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), tiene como objetivo fortalecer la infraestructura energética del país y acelerar su descarbonización.
Según ha informado el propio MITECO, las ayudas estarán disponibles hasta el 15 de julio y permitirán financiar más de un centenar de proyectos, con una previsión de entre 2,5 y 3,5 GW de nueva potencia instalada. Esta nueva capacidad de almacenamiento será clave para facilitar la integración de energías renovables en el sistema eléctrico nacional y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
El programa está dirigido tanto a proyectos independientes (baterías stand-alone, almacenamiento térmico o bombeo reversible), como a soluciones hibridadas con instalaciones de generación renovable, ya sean nuevas o existentes. Se cubrirán costes relacionados con obra civil, sistemas de almacenamiento, equipos auxiliares y otros gastos asociados a la ejecución.
Objetivo: un sistema más flexible y sostenible
El almacenamiento energético es una de las piezas fundamentales para garantizar un sistema eléctrico más robusto, capaz de gestionar la intermitencia de las energías renovables y asegurar el suministro en todo momento. En palabras del IDAE, estas tecnologías actúan como “elementos habilitadores” que proporcionan mayor flexibilidad al sistema y contribuyen a abaratar el coste de la electricidad.
Además, el impulso a este tipo de instalaciones se enmarca en los compromisos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) y del plan REPower EU, con los que España refuerza su hoja de ruta hacia un modelo energético sostenible y resiliente.
El diseño de la convocatoria tiene en cuenta la necesidad de reducir las desigualdades regionales, por lo que el presupuesto se distribuye entre las comunidades autónomas según criterios de desarrollo territorial. Las regiones menos favorecidas o en transición recibirán una mayor asignación, con el objetivo de fomentar un desarrollo equilibrado y sostenible.
La selección de los proyectos se realizará en varias rondas competitivas, priorizando aquellos con mayor puntuación técnica y viabilidad, y permitiendo la redistribución de excedentes entre comunidades.
Los beneficiarios podrán solicitar anticipos de hasta el 100% de la ayuda concedida, siempre que cumplan con los requisitos establecidos, lo que facilitará la puesta en marcha de las iniciativas sin necesidad de grandes desembolsos iniciales.
Para resolver dudas y ofrecer orientación técnica a los posibles solicitantes, el IDAE organizará un webinar el próximo 5 de junio, donde se explicarán los detalles del proceso y las condiciones de participación.
Una apuesta por el tejido industrial nacional
Estas nuevas ayudas complementan los fondos ya movilizados a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), que han permitido impulsar instalaciones con 4,5 GW de potencia gracias a una inversión de 730 millones de euros.
Además de su impacto directo en la transición energética, esta estrategia promueve el desarrollo de una industria nacional del almacenamiento, al estilo del sector eólico o fotovoltaico, donde España ya ha alcanzado un alto grado de autonomía tecnológica.
Con esta convocatoria, el Gobierno reafirma su compromiso con una transición energética justa, equilibrada y centrada en el fortalecimiento del sistema eléctrico nacional, en línea con los objetivos europeos de neutralidad climática.
