El cambio climático ya no es una previsión, sino que por el contrario ya está aquí. Los resultados presentados en el “Informe T: evolución de las temperaturas en España", que ha sido elaborado por el Observatorio de la Sostenibilidad con la colaboración de Mario Mingarro y Jorge M. Lobo del Museo Nacional de Ciencias Naturales, son alarmantes. El documento recoge las tendencias de millones de datos procedentes de las estaciones de la AEMET, “Análisis de las temperaturas en España 1961-2028. Rejillas mensuales de temperaturas” que normaliza los datos aparecidos en las diferentes estaciones. El informe se completa con las series temporales hasta 2020 a escala estatal y con la visualización delas series temporales delas estaciones con series temporales de datos extensas. El estudio resume y compara a través del análisis detallado de las series temporales el comportamiento de las diferentes zonas geográficas y unidades administrativas del país. Al ser datos normalizados, en una malla con continuidad espacial, permiten, por primera vez, determinar tendencias a escala administrativa.
De la investigación se desprenden los siguientes resultados: En primer lugar, se observa la tendencia global al calentamiento en el país desde que existen series de datos comparables, es decir desde 1961. Se observa como 2020 ha sido el año más cálido igualando al año 2017, 2016-2020 el quinquenio más cálido y 2011-2020 la década más cálida desde que existen datos en España. En segundo lugar, el documento advierte que las temperaturas se han elevado en los últimos 30 años, pero no en todas las provincias de igual manera. Los resultados obtenidos muestran cómo las temperaturas medias se han incrementado, en promedio, 0,20ºC por década con un valor máximo en Barcelona (0,31ºC/década) y un mínimo en Salamanca (0,04ºC/década). La tasa promedio de incremento en las temperaturas máximas es 0,19ºC/década, siendo máxima en la provincia de Granada (0,41ºC/década) y mínima en Melilla (0,06ºC/década). Asimismo, el rango térmico apenas ha experimento cambios, en promedio, aunque hay provincias como Gerona o Granada en las que las diferencias entre los meses fríos y cálidos han experimentado aumento, y otras como Ceuta, Melilla o Asturias en las que estas diferencias han tendido a disminuir.
En tercer lugar, las temperaturas también han subido en las diferentes comunidades autónomas, comparando los datos entre los primeros 30 años de información y los segundos 30 de la misma. Por último, respecto a las estaciones Madrid-Retiro y Zamora, en las dos estaciones climáticas con más datos, se observa que la variación temporal en las temperaturas medias de las máximas mensuales suelen mostrar un primer periodo en el que las temperaturas son estables o disminuyen y un segundo periodo en el que esas temperaturas se incrementan.
Mario Mingarro, uno de los realizadores de la investigación, señala que “el cambio climático ya está aquí, y estamos inmersos en él, como puede observar con los datos recogidos en la AEMET”. “El promedio de incremento de la temperatura mínima del mes más frío es de 0,18ºC por década, mientras que el promedio del incremento de la temperatura máxima del mes más cálido es ligeramente menor (0,15ºC/década), no obstante, para analizar el cambio climático resulta muy importante atender a las diferentes escalas espaciales”. Por su parte, Jorge M Lobo, codirector del estudio, indica que en las series temporales largas se observan dos comportamientos diferentes, una parte más estable con ligero aumento de los valores y un punto de inflexión que suele ocurrir entre los años 70 y 80, tras el cual se aprecia claramente un incremento notable de la temperatura. Este patrón coincide con lo observado en otras partes del mundo.
A raíz de los contundentes resultados expuestos, el Observatorio de Sostenibilidad considera que en nuestro país debiera ser obligatorio reducir las emisiones. Además urge comenzar a adaptarnos a esta nueva realidad de aumento de las temperaturas y de fenómenos meteorológicos extremos como los observados en estas semanas ya que van a volver a manifestarse inundaciones sequias, olas de calor, de frío, temporales, etc. El futuro ya está aquí y depende de nosotros hacer que este sea lo mejor posible.