En un mundo cada vez más competitivo y globalizado, las empresas luchan por mantenerse a la vanguardia y garantizar su éxito en el mercado. A menudo, nos centramos en aspectos como la innovación tecnológica, la eficiencia operativa y la estrategia empresarial, olvidando que, en última instancia, son las personas quienes conforman y dirigen estas organizaciones. En este sentido, la pandemia dejó un gran aprendizaje para todas las empresas: debemos ir más allá y estar más cerca de los empleados, de sus necesidades y, sobre todo, ser más humanos.